En el discurso pronunciado con motivo de la celebración del día de la Independencia de Centroamérica (Guatemala, El Salvador, Honduras, Nicaragua, Costa Rica), el alto diplomático apuntó que los envíos rusos de ayuda humanitaria para la lucha contra la pandemia del COVID-19 a los países del Sistema de la Integración Centroamericana (SICA) y el Parlamento Centroamericano (Parlacen) han sido "una nueva muestra de la asociación de confianza" entre Rusia y América Central.
"Estamos dispuestos para un trabajo conjunto con los socios latinoamericanos encaminado a contrarrestar el COVID-19, incluido organizar una producción local y suministrar la vacuna Sputnik V", dijo.
Rusia registró oficialmente su vacuna el pasado 11 de agosto. El fármaco, desarrollado por el Centro de Epidemiología y Microbiología Gamaleya, cuenta con una autorización especial: la vacuna se puede administrar solo a personas de grupos de riesgo y bajo un control estricto.
El 10 de septiembre pasado el director del RFPI, Kiril Dmítriev, comunicó que Rusia prevé suministrar en total más de 130 millones de dosis de su vacuna Sputnik V a países de América Latina.
Además, Rusia ha destacado a Brasil y Cuba como países que cuentan con suficientes capacidades para producir la vacuna rusa.