El consistorio de la capital, tras una votación en el Pleno del 29 de septiembre, acordó retirar del callejero de la ciudad el nombre de dos políticos históricos del PSOE: el del expresidente del Consejo de Ministros durante la II República y exsecretario general del sindicato UGT, Francisco Largo Caballero, y del exministro Indalecio Prieto.
La ultraderecha ha arrastrado al PP y Cs. Lamentable noticia para una ciudad noble, plural y abierta como Madrid. Podrán quitar sus placas pero nunca podrán borrar su memoria en favor de la libertad y la justicia social del corazón de los madrileños. https://t.co/sPGWtTgDMw
— Pedro Sánchez (@sanchezcastejon) September 29, 2020
La paradoja de recurrir a la Ley de Memoria Histórica
La propuesta, promovida por la formación Vox y apoyada por el Partido Popular (PP) y Ciudadanos (Cs) buscaba retirar placas conmemorativas, nombres de calles y dos estatuas en honor de los dos políticos socialistas.
En opinión del historiador Gutmaro Gómez Bravo, "no se puede equiparar" la figura de Largo Caballero e Indalecio Prieto ni al franquismo ni a régimen totalitario alguno. "Pero es lo que buscan", aclara a Sputnik, refiriéndose a la postura adoptada por los partidos que han votado a favor de la medida. "Ambos políticos fueron ministros de un gobierno elegido democráticamente", zanja este profesor e investigador de la Universidad Complutense de Madrid.
Largo Caballero no tuvo una trayectoria política violenta pero si sufrió un atentado. No planifico la revolución de Asturias pero sí fue acusado por ello. El gobierno no estaba en Madrid en Paracuellos pero terminó con la junta de defensa y con los jurados populares. Poco importa pic.twitter.com/WL1aKIXC8N
— gunde_bravo (@gunde_bravo) September 29, 2020
Desde las asociaciones memorialistas denuncian que la iniciativa aprobada en el Ayuntamiento de Madrid se sostiene en realidad en un relato que contiene puntos de la propaganda del régimen franquista. "Se está intentando implantar un revisionismo histórico basado en mitos del franquismo", manifestó a Infolibre Arturo Peinado, presidente de la Federación Estatal de Foros por la Memoria. "Es parte del arte de la política", explica al respecto el politólogo Manuel Monereo. "Una parte entraña el engaño y la mentira, es lo que se llama el uso alternativo de la ley".
Veo a gente por aqui comparando la Fundación Francisco Franco con la Fundación Largo Caballero y no puedo mas que cabrearme. Mientras una niega la entrada a su archivo a quien le apetece, en la otra permite se permite la entrada a quién quiera visitar los fondos.
— Ismael López Domínguez (@Ismael_Historia) September 30, 2020
¿De quién partió la idea de honrar la memoria de Largo Caballero?
La mención a UCD (Unión de Centro Democrático, la coalición que gobernó España entre 1977 y 1982) es significativa por cuanto fue uno de sus concejales en el Ayuntamiento de Madrid, Carlos Alonso de Velasco, quien propuso la idea en 1981 de instalar una placa conmemorativa en la casa natal de Francisco Largo Caballero, en el barrio de Chamberí.
Su iniciativa fue secundada por todas las fuerzas políticas de entonces, también Alianza Popular (AP), que era como se denominaba entonces el PP. "La UCD, que integraba de una parte a franquistas reformistas y de otra al ala moderada de los demócratas rupturistas, encarnó el único propósito de las derechas españolas de reconciliarse con la izquierda", afirma Monereo.
El PP ha decidido Retirar del callejero de Madrid a los Socialistas Largo Caballero e Indalecio Prieto y, mantener la calle en homenaje a los colaboradores con del Nazismo y el holocausto, La División Azul.
— JCCruz (@JC_C_A) September 30, 2020
La batalla política a través de la guerra cultural
Para el politólogo Ignacio Jurado, lo sucedido en el Pleno del Ayuntamiento de Madrid demuestra que "la guerra cultural, para Vox, es un eje fundamental de su acción política, de su discurso y de su labor en las instituciones".
"Y esta batalla", declara a Sputnik este profesor de ciencia política de la universidad Carlos III, "en el caso de España se centra mucho en la Memoria Histórica". "Es una batalla que la van a ejercer sin ningún tipo de concesiones, como una enmienda a la totalidad. El hecho de que se junte a Prieto con Largo Caballero demuestra que esto se hace sin ningún tipo de matices, con voluntad de entrar directamente en el fango de la batalla", afirma.
"Porque las luces y sombras de Indalecio Prieto no son comparables a las de Largo Caballero, por ejemplo. Metiendo a los dos en el mismo saco, se hace una enmienda a la totalidad de la Memoria Histórica y de la República", afirma este politólogo.
"Así que sus dirigentes hablaban poco de estas cosas y dejaban a sus intelectuales que las defendieran. Pero con Vox ya no es posible; Vox tiene pillado al PP en el núcleo duro de su ideología, que no es otra que la vieja derecha española de la CEDA, de Renovación Española, y de las derechas monárquicas y golpistas que desde el primer día conspiraron contra la República".
Retiran la calle a Indalecio Prieto por (según Vox, PP y C's) era un "sanguinario" y "antidemócrata".
— Ⓜ️ario (@mariofdez98) September 29, 2020
Bueno, dejo un fragmento del discurso que dirigió a las milicias de la Guerra Civil en agosto de 1936; y otro que realizó en mayo de 1942. Que cada uno juzgue. pic.twitter.com/vAVylNUagz
El rigor histórico
Los argumentos de la propuesta de Vox aprobada con los votos de PP y Cs señalan a F. Largo Caballero e Indalecio Prieto como instigadores de tumultos y crímenes, así como de robar las reservas de oro del Banco de España durante la Guerra Civil en el caso del segundo.
Tal día como hoy de 1936, milicianos socialistas robaron el 72% de las reservas de oro del Banco de España (más de 500 toneladas) para pagar los favores de Stalin.
— VOX 🇪🇸 (@vox_es) September 13, 2020
El PSOE suma 141 años de latrocinio de lo público. Esta es la memoria histórica que quieren borrar.#OroDeMoscú pic.twitter.com/arhXjRqGt7
El historiador Gutmaro Gómez Bravo refuta tales acusaciones, a las que caracteriza por carecer de "rigor histórico". "Algunas de las afirmaciones son errores históricos graves, consensuados en la historiografía desde la época de la Transición al menos", afirma. Gómez Bravo, cuyas líneas de investigación incluyen la Guerra Civil española y es especialista en temas de violencia política y control social, explica que la propuesta votada en el consistorio madrileño "es una cuestión política, porque desde el punto de vista histórico no hay por dónde cogerla".
"Si tienen que ir contra los datos, buscan otros. Y si no son ciertos, pues se parecerán al menos. Cuando tú conviertes la historia en un instrumento para dirimir los problemas ideológicos del presente, la historia se manipula", declara Monereo a Sputnik.
Historiadores como Ángel Viñas han reaccionado de inmediato a las acusaciones contenidas en el texto de la propuesta de Vox. Por ejemplo, en un artículo publicado en su blog personal, Viñas recuerda que la salida de las reservas de oro del Banco de España "fue una medida de prudencia", habida cuenta de la imposibilidad de continuar la "resistencia" frente a los sublevados si estos se hacían con los lingotes. También subraya que Francia y Bélgica recurrieron a esta medida durante la Segunda Guerra Mundial. El país galo envió sus reservas a sus posesiones de ultramar y a Nueva York.
Me dicen que VOX ha presentado una PNL en el Ayto de Madrid para retirar del callejero el nombre y la estatua de Largo Caballero. Lo hacen con una sarta de mentiras, barbaridades y basura histórica maloliente. Se retratan ellos y quizá con ellos otras formaciones.
— Angel Viñas (@angelvinashist) September 29, 2020
Más allá de la propuesta de Vox
Según el politólogo Ignacio Jurado, cabe hacer una reflexión acerca del apoyo de PP y Cs a la iniciativa de Vox, "atendiendo al hecho de que la hayan aceptado al parecer sin ningún tipo de miramientos".
"Para PP y Cs es una manera fácil de satisfacer a Vox, y así mantenerle como un pilar importante de su gobernabilidad. El hecho de que esta concesión haya tenido lugar sin miramientos, probablemente nos muestra que en el futuro seguirá habiéndolas de este tipo: apoyo a la gobernabilidad a cambio de concesiones de tipo simbólico", concluye.
"La propuesta de Vox tiene una cierta coherencia también con el PP", añade Manuel Monereo. "De hecho, no es nada nuevo". Este politólogo explica que con la negación de los valores de la cultura democrático-republicana, se legitima la dictadura franquista como elemento de democratización del país "mediante un discurso muy inteligente". "Pero con Vox todo es mucho más claro", dice Monereo, quien especifica que este partido se ha limitado a vehicular el discurso de la derecha aznarista, que hasta ahora difundían sus intelectuales y no sus parlamentarios.
"Mientras tanto, la izquierda ha hecho un discurso insípido de la llamada Transición democrática, dedicándose a descalificar los discursos históricos de la derecha en términos de ciencia histórica, cuando eso no le interesa a nadie", admite.
"Se ha dejado a la derecha que manipule la memoria histórica del país. Y es en este contexto donde hay que ver lo que está pasando con las figuras de Largo Caballero e Indalecio Prieto. Vox hace de la lectura neofranquista de la realidad su fundamento, algo que también piensa el PP. Pero para ganar la hegemonía en la derecha y neutralizar al PP, Vox usa la memoria histórica", concluye este veterano politólogo.
El tema de las calles de Madrid que dejarán de llevar el nombre de Prieto y Largo Caballero no es una anécddota, ni una trifulca historicista. Es el signo de la victoria estratégica de Vox sobre el PP (aquel PP que reivindicaba a Azaña).
— Enric Juliana Ricart (@EnricJuliana) September 30, 2020
Y signo del despiste de Ciudadanos.