Desde Japón suelen llegar tendencias exóticas, que en algunos casos se expanden luego por el mundo. El término johatsu significa evaporación y hace referencia a aquellas personas que desaparecen de un día para el otro, sin avisarle a nadie y sin dejar rastros.
"Tiene que ver con varias cosas. Primero con el nivel de presión social de los demás sobre nosotros. Nos exigen un tipo de identidad, un conjunto de responsabilidades, una manera de ser y estar que muchas veces es construida para un afuera. Pero uno en realidad quiere cambiar de vida, de trabajo, de familia o de entorno cultural", explicó el antropólogo uruguayo Nicolás Guigou.
Aunque considera que esta fantasía de desaparecer siempre existió, e incluso fue retratada en muchas películas, lo novedoso es la profesionalización del servicio. Es decir, que ahora existan empresas que se encarguen de "borrar tus huellas en el mundo social". Compara al fenómeno con la migración, aunque a un nivel mucho más extremo.
Para el antropólogo hay un aspecto fundamental que explica la tendencia johatsu y es la debilidad en los vínculos afectivos, sumado al creciente individualismo y al descreimiento en las instituciones.
"Los niveles de afecto sobre los otros son muy relativos, no solo en las amistades sino en las estructuras familiares. Creo que este es el espíritu de la época: estamos en una sociedad cada vez menos afectiva e hiperindividualizada. También hay una crisis de los mundos morales, en relación con lo que uno esperaba de las esferas institucionales", explicó.
Las compañías que ofrecen servicios de mudanzas nocturnas detectaron esta necesidad de los johatsu. Los ayudan a retirarse de sus vidas en forma discreta y les proporcionan alojamiento en ubicaciones desconocidas. Contratar profesionales se vuelve cada vez más necesario, en un mundo globalizado e hiperconectado.
"Desaparecer es muy complicado porque hay huellas por todos lados. A una persona que quiera hacerlo por sí misma le va a llevar mucho trabajo. Pero borrar la identidad en una sociedad como esta nos deja en una situación de fragilidad extrema. Hay que ver qué nivel de seguridad y de garantías dan estas empresas", concluyó Guigou.
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