"Durante la conversación los ministros examinaron detalladamente la situación en la zona del conflicto de Nagorno Karabaj, expresaron su profunda preocupación por las continuas hostilidades de gran escala y llamaron a las partes beligerantes a una cesación del fuego total y rápida y una desescalada de la tensión", señala el texto.
Lavrov y Le Drian, según la nota, destacaron la importancia "de las futuras medidas concertadas de los copresidentes del Grupo de Minsk de la OSCE (Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa) de conformidad con la declaración conjunta de los presidentes de Rusia, Estados Unidos y Francia".
Lavrov recordó que la Fiscalía General de Rusia todavía no ha recibido respuesta a su solicitud oficial sobre el caso de Navalni enviada a París en el marco de un mecanismo internacional de asistencia jurídica.
Además, los dos cancilleres examinaron los temas de actualidad de la agenda bilateral.
A su vez, el portavoz del Gobierno alemán, Steffen Seibert, señaló en una sesión informativa para los medios que Berlín también llama a declarar de inmediato el alto el fuego en Nagorno Karabaj y entablar las negociaciones entre las partes sin fijar precondiciones.
El 27 de septiembre volvieron a estallar los choques armados en Nagorno Karabaj, foco de conflicto entre Armenia y Azerbaiyán desde que este territorio de población mayoritariamente armenia decidió separarse en 1988 de la entonces República Socialista Soviética de Azerbaiyán.
Azerbaiyán insiste en la conservación de su integridad territorial, mientras Armenia defiende los intereses de la república autoproclamada, que no es parte de las negociaciones.
Ambos bandos, que se acusan de haber desatado la nueva espiral bélica sin precedentes desde la guerra de 1992-1994, ordenaron movilización de reservistas, impusieron ley marcial y libran combates con el uso de blindados, artillería, aviación y sistemas de misiles a lo largo de la línea que separa a sus tropas.
El 1 de octubre, EEUU, Rusia y Francia instaron a poner fin de inmediato a las hostilidades en Karabaj y reanudar las negociaciones sin condiciones previas.