"El 12 de octubre, con la Asociación de Víctimas del Paro Nacional, vamos a poner una demanda contra el Estado por delitos de lesa humanidad y, si no tenemos respuesta en Ecuador, llevaremos el caso a nivel internacional porque esto no puede quedar ni en el perdón ni en el olvido", dijo Iza, entrevistado por la Red de Comunicación Kapari.
"Sobre los manifestantes muertos y heridos no existe siquiera una pesquisa", destacó el dirigente indígena.
A decir del presidente del MICC, por estos hechos deberán responder el Gobierno nacional y los ministros que ordenaron reprimir las protestas mediante el uso de la violencia, incluso después de que dejen de estar en el poder.
De acuerdo con Iza, aprovechando la emergencia sanitaria por el COVID-19, el Presidente Lenín Moreno impuso la flexibilización laboral, eliminó los subsidios a los combustibles a través de un esquema de bandas y hace poco firmó un decreto que autoriza a la empresa privada a importar libremente combustibles, que en el futuro dará paso a la eliminación del subsidio al gas.
Este escenario, abonado con los despidos masivos en los sectores público y privado, está gestando una escalada de lucha en Ecuador, advirtió Iza.
Entre tanto, la CONAIE en conjunto con su filial de la Sierra, Ecuarunari, incluidas las organizaciones de base, preparan para el 9 y 10 de octubre actos de conmemoración por los sucesos de hace un año.
Dichos actos se realizarán en la comunidad San Isidro del cantón Pujilí (centro), de donde era oriundo Inocencio Tucumbi, uno de los 11 fallecidos como resultado de la represión durante las jornadas de octubre de 2019.
En enero pasado, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) instó al gobierno ecuatoriano a que investigue y sancione a los responsables de la violencia y excesivo uso de la fuerza durante las manifestaciones de octubre pasado, tanto de parte de los agentes de la Policía y de las fuerzas de seguridad, como de los hechos de agresiones y saqueos por parte de la población.
Durante las movilizaciones y protestas de octubre, en Ecuador hubo saqueos y destrucción de bienes públicos y privados, vandalismo, bloqueos de carreteras, daños a instalaciones de producción de petróleo y una serie de actos violentos, incluida la quema del edificio de la Contraloría de la Nación, hechos sin precedentes en la historia del país andino.
Según la Defensoría del Pueblo de Ecuador, durante las protestas fallecieron al menos ocho personas, hubo 1.192 aprehensiones y 1.340 heridos.
