A partir del 5 de octubre, toda persona con un caso sospechoso de enfermedad respiratoria viral y que haya estado en contacto en los últimos 14 días con un caso o defunción confirmada será contabilizada como un caso positivo.
El subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell, explicó que el uso del laboratorio es importante para el diagnóstico, pero no representa el único método para determinar si un paciente tiene COVID-19.
"La vigilancia epidemiológica busca ampliar el panorama de diagnóstico y en muchas circunstancias no se puede tener el resultado de una prueba de laboratorio. Pero analizando la situación, el contexto, si una persona tuvo contacto con alguien que tiene diagnóstico por laboratorio por COVID-19 se infiere que también esa persona, que tenga los mismos síntomas o parecidos, tiene COVID-19", indicó.
A su vez, el director general de Epidemiología, José Luis Alomía Zegarra, comentó que el aumento en el total de casos se debe a la aplicación de la nueva metodología utilizada por las autoridades de Salud.
Alomía Zegarra indicó que desde el 5 de octubre se estará integrando a las estadísticas oficiales esta definición operacional, denominada "caso confirmado por asociación epidemiológica", la cual concentrará a los casos sospechosos de enfermedad respiratoria viral sin muestra de laboratorio y en contacto con un caso de defunción o enfermedad confirmada.
"Durante los últimos dos meses [agosto y septiembre], básicamente después de que se activó esta nueva definición operacional, las entidades empezaron a usarla, tanto esta definición como una previa que también ya habíamos comentado, que era el dictamen clínico-epidemiológico, que, como su nombre lo dice, o para efectos del dictamen se aplica a las lamentables defunciones", dijo.
Al desglosar el total de casos positivos contabilizados por Salud, 757.085 fueron confirmados por laboratorio, 24.120 por asociación epidemiológica, mientras que 578 se registraron por dictaminación médica, una alerta de caso positivo con base en signos, síntomas, evolución clínica, así como determinantes alrededor de la persona, como haber tenido contacto con un caso de COVID-19 confirmado por laboratorio.
A nivel mundial, México registra el cuarto registro más alto de decesos totales, por debajo de Estados Unidos (210.237), Brasil (146.675) e India (103.569), según datos de la Universidad Johns Hopkins.