José Mario Molina-Pasquel y Henríquez nació en la Ciudad de México el 19 de marzo de 1943. Fue ingeniero químico egresado de la UNAM en 1965, tras lo cual realizó un posgrado en la Universidad de Friburgo, Alemania (1967) y recibió un doctorado en Fisicoquímica de la Universidad de California en Berkeley, Estados Unidos (1972).
De 1976 a 1986, el trabajo del doctor Molina y de varios investigadores ayudó a identificar las propiedades químicas de los gases que provocan la descomposición de la capa de ozono. Esos hallazgos han sido claves para enfrentar el problema de la degradación en la calidad del aire de las grandes ciudades del planeta.
Los descubrimientos de Molina también hicieron posible la creación del Protocolo de Montreal de las Naciones Unidas, considerado como el primer tratado internacional que ha enfrentado con efectividad los problemas ambientales que provocan daños a la capa de ozono.
Además del Premio Nobel, Mario Molina fue reconocido en múltiples ocasiones: se le otorgaron más de 40 doctorados Honoris Causa, el Premio Tyler de Energía y Ecología en 1983, el Premio Sasakawa de las Naciones Unidas en 1999, el Premio Campeones de la Tierra de las Naciones Unidas, así como la Medalla Presidencial de la Libertad de Estados Unidos, siendo el primer mexicano en recibir ese galardón.
Desde 2005, Molina presidía un centro de investigación y promoción de políticas públicas bautizado con su nombre, donde realizó estudios estratégicos en relación con temas de energía y medio ambiente, e igualmente en los campos de cambio climático y calidad del aire.
Previamente fue investigador del Departamento de Química y Bioquímica y del Instituto de Oceanografía SCRIPPS en la Universidad de California en San Diego (UCSD), una de las instituciones líderes en la investigación de los fenómenos asociados al cambio climático.