"La delegación mexicana transmitió la invitación presidencial a que el Gobierno austriaco acompañe a México en el programa de conmemoraciones históricas emblemáticas a realizarse en septiembre de 2021", con motivo de la consumación de la Independencia mexicana hace 200 años y los 500 años de la caída de Tenochtitlán, capital del antiguo imperio mexica, informó la cancillería.
Ambas delegaciones reafirmaron la intención de ampliar el intercambio y la cooperación cultural, y suscribieron una "carta de intención" entre el Gobierno de México y la Biblioteca Nacional de Austria, atestiguada por la Gutiérrez Müeller, agrega la nota.
El objetivo del convenio es ampliar el acceso público digital al patrimonio histórico y "sumar al repositorio cultural de Memórica", disponible en el portal web del Gobierno, a través de la colaboración atestiguada por la directora de la Agencia Mexicana de Cooperación Internacional para el Desarrollo, Laura Elena Carrillo.
En busca de piezas arqueológicas
La esposa de López Obrador, graduada en historia del arte durante la Conquista española de 1521, informó que llegó a Austria, después de una gira por Francia e Italia, en la ha solicitado el préstamo de documentos históricos para ser exhibidos en las mencionadas celebraciones de 2021.
"El patrimonio cultural de la humanidad se comparte, por eso es de todos, no de un particular", escribió Gutiérrez Müller en sus redes sociales.
El acuerdo binacional "permitirá que todos los mexicanos conozcan el acervo digitalizado de esta histórica e importantísima biblioteca europea", detalló.
Uno de los objetivos de su viaje era obtener piezas históricas y arqueológicas de México para ser exhibidas durante el Bicentenario de la Independencia.
"Le recomendé que insistiera en el Penacho de Moctezuma", reveló López Obrador en su cuenta de Twitter, en referencia a una pieza cuyo origen es controvertido y en el siglo XIX fue atribuido al emperador mexica de ese nombre, que lo habría obsequiado en el siglo XVI al conquistador español Hernán Cortés.
Le recomendé que insistiera en el penacho de Moctezuma, aunque se trata de una misión casi imposible, dado que se lo han apropiado por completo, al extremo de que ni a Maximiliano de Habsburgo se lo prestaron cuando nos invadieron e impusieron al llamado Segundo Imperio Mexicano.
— Andrés Manuel (@lopezobrador_) October 12, 2020
Se trata de tocado de plumas de quetzal tejidas en oro que se encuentra en el Museo de Etnología de Viena, y obtenerlo "se trata de una misión casi imposible, dado que se lo han apropiado por completo, al extremo de que ni a Maximiliano de Habsburgo se lo prestaron", dijo el mandatario, aludiendo al emperador y archiduque de Austria que reinó en México desde 1863 hasta su fusilamiento en 1867.
El jefe de Estado se refirió al personaje controvertido del siglo XIX y señaló que ni siquiera a él "se lo prestaron cuando nos invadieron e impusieron al llamado Segundo Imperio Mexicano", después del español.
"Estamos recuperando el Mapa de Tenochtitlán en Viena, Austria (…), no nos vamos a dejar de nadie y tenemos claras las prioridades", escribió López Obrador en otro mensaje.
El líder de la izquierda nacionalista mexicana explicó en una carta entregada por su esposa al papa Francisco que ella realiza este viaje "para obtener códices, objetos y documentos de nuestra historia que puedan exponerse en nuestro país el año próximo, cuando se cumplirán los 700 años de la fundación de México-Tenochtitlán, los 500 años de la invasión colonial española y el bicentenario de nuestra Independencia".
Los documentos históricos solicitados a la iglesia Católica son cuatro: primero, el Códice Borgia, de la cultura mixteca; segundo, el Códice B/Codex Vaticanus, de la cultura náhuatl; tercero, el Códice Vaticano 3738, del siglo XVI, de la cultura tolteca-chichimeca; y cuarto, los mapas de Tenochtitlán, capital del imperio mexica, también conocido como azteca.