"Es peligroso, ahora tenemos a los turcos, que han provisto de recursos a Azerbaiyán, aumentando el riesgo, aumentando el poder de fuego que tiene lugar en este histórico conflicto en la zona denominada Nagorno Karabaj, un pequeño territorio con cerca de 150.000 personas", afirmó el funcionario.
Pompeo destacó que el largo conflicto solo podría resolverse a través de conversaciones de paz, no mediante un enfrentamiento armado, "y ciertamente no con terceros países integrándose para acercar fuego al polvorín que es esta situación".
"Tenemos la esperanza de que los armenios sean capaces de defenderse de lo que los azerbaiyanos están haciendo, y que todos acepten el cese al fuego y se sienten a la mesa para buscar una salida a lo que es un verdadero problema histórico", agregó.
Pashinyan también dijo que los planes de Turquía y Azerbaiyán para tomar el control de Nagorno-Karabaj con una guerra relámpago fracasaron hace tiempo.
La lucha en la línea de contacto en Nagorno-Karabaj comenzó el 28 de septiembre con Armenia y Azerbaiyán acusándose mutuamente del comienzo de las hostilidades.
La comunidad internacional condenó con firmeza la escalada y llamó a las partes a resolver el conflicto mediante el diálogo, mientras que Turquía desplegó todo su respaldo a Azerbaiyán.
Las dos partes acordaron la semana pasada un cese al fuego humanitario mediado por Rusia, pero la lucha continúa.