La experta recordó que los productos secos se guardan mejor a temperatura ambiente, y los húmedos en el frigorífico.
Según Tiainen, los plátanos también se guardan a temperatura ambiente, aunque pueden oscurecerse demasiado rápido.
Se pueden conservar los huevos tanto a temperatura ambiente como en el frigorífico, aconsejó la experta.
La leche pasteurizada y la vegetal antes de ser abiertas se guardan también a temperatura ambiente, y se meten en el frigorífico solo una vez que el envase queda abierto.
Los alimentos como los pepinos, los tomates, los pimientos y la ensalada se guardan por norma general a temperatura ambiente o en una sección fresca del frigorífico, añadió Tiainen. La especialista subrayó que los tomates conservan mejor el gusto, maduran y son sabrosos fuera de la nevera.