"No hay discusiones sobre el tema", dijo Peskov al ser preguntado al respecto por los periodistas.
Peskov señaló que la cuarentena que se impuso en marzo debido a la falta de medios de protección personal y equipos de ventilación mecánica, pero ahora la escasez se ha eliminado.
"El sistema está preparado para resistir ante la presión que la pandemia está ejerciendo ahora", añadió Peskov.
Según Peskov, la situación epidemiológica en Rusia ahora "es bastante comparable a lo que hubo en primavera".
Además, el presidente Vladímir Putin, declaró que las autoridades rusas no tienen planes de imponer duras restricciones ante la pandemia.
Sin embargo, constató que las medidas puntuales en varias organizaciones y territorios del país están justificadas y deben seguir aplicándose.
"Es necesario vigilar estrictamente cómo se cumplan en sus empresas las normas propuestas por los especialistas" sanitarios, exhortó Putin a los participantes de la reunión, y agregó que de eso depende el funcionamiento de organizaciones.
"En cuanto a las medidas restrictivas complejas y totales: no tenemos planes de hacerlo, el Gobierno no lo planea", dijo el líder ruso en una reunión con miembros de la Unión Rusa de Industriales y Empresarios.
Puntualizó que los científicos desarrollan nuevos fármacos, medicamentos y vacunas para combatir el COVID-19.
Sobre todo hay que asegurar que el mercado de Rusia cuente con todos los medicamentos necesarios para combatir la pandemia, subrayó el presidente.
"El camino principal de esta lucha consiste en seguir realizando pruebas, cumplir con medidas de precaución y, por supuesto, vacunarse", recalcó el mandatario.
"La vacunación en la Federación de Rusia es el objetivo número uno para nosotros. Las exportaciones y lo demás sí son importantes, pero es una cuestión secundaria", subrayó Putin.
La tarea principal consiste en aumentar la capacidad de producción, añadió el presidente.
En este contexto, el líder ruso se dirigió a los empresarios rusos que se encargan de la producción y distribución de productos farmacéuticos y les instó a "participar más en este trabajo y asegurar la cantidad necesaria de la vacuna producida por Rusia".
Enfatizó que pronto Rusia registrará su tercera vacuna contra el COVID-19, desarrollada por el centro ruso de investigaciones y desarrollo de sustancias inmunobiológicas Chumakov, y que todas las vacunas rusas registradas demostraron su eficacia.
"La gente las necesita. Además, es un buen negocio", agregó el mandatario.
Precisó que, según estimaciones preliminares, el volumen de ventas de la vacuna rusa anti-COVID-19 en el mercado internacional puede alcanzar alrededor de 10.000 millones de dólares.
"A pesar de que, por desgracia, crece el número de los que padecen de esta infección viral (...) en general, nuestros médicos aprendieron cómo combatirla", afirmó Putin.
"Por desgracia, la tasa de mortalidad (...) por coronavirus creció frente a la de la primavera, pero los especialistas dicen que eso también se debe a que (las autoridades sanitarias) comenzaron a registrar mejor, más detenidamente, las causas de muerte", dijo el presidente ruso.
Añadió que la tasa de mortalidad general disminuyó casi dos veces en comparación con las cifras de primavera, lo que muestra cómo actualmente funciona en general el sistema de sanidad del país.
Para la fecha, Rusia suma 1.447.335 contagios de COVID-19 y 24.952 decesos asociados, luego de que se registraron 15.700 contagios y 317 muertes en el último día.