El proceder de esta banda organizada no pasó desapercibido a los uniformados. El repartidor de pescado que viaja por la serranía de Cádiz vendía algo más. Aprovechando su licencia y trasiego comercial, abastecía a todos los distribuidores intermedios de droga de la región. En total, 29 personas han sido detenidas acusadas de delitos de pertenencia a organización criminal, tráfico de drogas y tenencia ilícita de armas.
Según comunica la Policía Nacional, en total se han realizado 18 registros domiciliarios en diferentes localidades gaditanas y sevillanas, en ellas se ha intervenido un total de:
- 1.860 gramos de cocaína;
- 170.000 euros en efectivo aproximadamente;
- 15 vehículos;
- 421 plantas de marihuana;
- 1.500 gramos de cogollos de marihuana;
- 359 gramos de hachís;
- 200 comprimidos de anabolizantes;
- un revólver y cuatro rifles de caza con silenciadores y miras telescópicas.
La intervención policial venía fraguándose de finales de 2019, cuando los agentes detectaron el menudeo en diferentes barriadas e identificaron a miembros de la banda, que contaba con puntos de venta asegurados por cámaras de vigilancia y puertas blindadas, además de falsos fondos en los armarios para esconder la droga. Incluso, dos de las viviendas estaban interconectadas para facilitar la huida en caso de redada. Por otro lado, contaban con otras dos viviendas en donde escondían el dinero efectivo.
Los uniformados detectaron que la droga venía a través del pescadero, según fuentes policiales, "el sujeto utilizaba la furgoneta de la pescadería para abastecer a los vendedores del clan de la Sierra con el pretexto de estar repartiendo pescado, utilizando su negocio familiar como tapadera para sus fines ilícitos".
Los cacos también padecen la pandemia
Las alarmas policiales saltaron con la llegada del confinamiento. La distribución de cocaína había sido alterada, pero los investigadores detectaron como los narcos de El Puerto contactaron con otro clan ubicado en Lebrija (Sevilla), lo que permitió acceder al clan sevillano. Este último grupo operaba a menor escala y fue ya desarticulado en junio. Los narcos usaban a sus parejas para poner viviendas y vehículos a nombre de ellas.
Actualmente, la investigación sigue en curso, pero por el momento, ya están bloqueadas 31 cuentas bancarias que acumulan unos 100.000 euros, 10 viviendas, 28 vehículos y una embarcación.
La tentación de la droga
Andalucía sigue asediada por la expansión del narcotráfico. El poder económico llega a corromper incluso a algunos operativos policiales. El 14 de octubre, en Huelva, se malogró una ambiciosa redada en la que intervenían 200 agentes.
Pero cuando las fuerzas del orden allanaron las viviendas de los cacos, no los encontraron a ellos, ni a la droga, ni al dinero, directamente les esperaban los abogados defensores, la gran redada acabó en mero esperpento. El juez de Primera Instancia e Instrucción número 4 de Ayamonte (Huelva) abrió de inmediato una investigación por "filtración grave".
Más allá del reparto y distribución de la droga, la entrada de la misma es el otro gran reto. Y en este aspecto, el litoral andaluz es un coladero. El último gran hito está en Málaga, donde ha sido desarticulada la organización delictiva más activa en un operativo conjunto con Europol. Se trata de una red internacional que introducía cocaína en España. La operación CETIL conectaba diferentes puertos como el malagueño y el valenciano con Holanda. En este operativo se llegaron a incautar 6.000 kilos de cocaína.
La droga va y viene mientras que, de fondo, en ciudades como la Línea de la Concepción, al sur de la provincia de Cádiz, la tasa de desempleo ronda el 40% —10.577 parados en septiembre en una localidad con cerca de 63.000 habitantes—. La Línea es el mejor ejemplo de como el narco penetra en una sociedad. Interior ha ampliado el Plan Especial con 48,2 millones de euros adicionales y extendió su período hasta diciembre de 2021. Pero el narcotráfico, ya está integrado hasta los huesos en una región de pocas oportunidades. Nada que perder para los cientos de jóvenes y vecinos que deciden jugar sus cartas en el gran negocio de la droga empezando por el menudeo.