"Confío en nuestra vacuna, confío en ella y en la capacidad de los científicos del instituto que la han desarrollado", dijo el director del instituto, Shmuel Shapira.
La vacuna ha recibido las aprobaciones del Ministerio de Sanidad y del Comité de Helsinki para experimentación en humanos.
"Este es un día de esperanza para los ciudadanos de Israel", dijo el titular de Defensa, Benny Gantz. "Hace solo dos meses recibimos la primera botella de la vacuna. Hoy ya tenemos 25.000 dosis", según el comunicado.
La primera fase en humanos durará siete meses y será llevada a cabo en unos 80 voluntarios saludables de 18 a 55 años en el centro médico Sheba, en Ramat Gan, y el hospital Hadasa, en Jerusalén.
El ensayo comenzará el uno de noviembre con dos voluntarios. Según como sean sus respuestas, los otros 78 recibirán gradualmente la vacuna, 40 personas en cada centro médico. Algunos de los voluntarios recibirán la vacuna y otros un placebo.
Serán monitorizados durante tres semanas.
Si ambas son superadas con éxito, la fase 3 se hará sobre 30.000 voluntarios en abril o mayo de 2021. Esa sería la última fase y si todo fuera correctamente, la vacuna sería aprobada.
Esta candidata a vacuna del IIBR está basada en un método de vacunación conocido, según el propio instituto ha dicho. La novedad es el uso de un virus de la estomatitis vesicular (VSV), un tipo de virus que no causa enfermedades en humanos.
A través de ingeniería genética, se adhieren proteínas al VSV para formar 'coronas' que son identificadas por el cuerpo como COVID-19. De este modo, el cuerpo produce anticuerpos contra el virus camuflado.