En vez de seguir recto a lo largo de la pista, el auto manejado por inteligencia artificial prefirió girar bruscamente las ruedas 90 grados a la derecha y acelerar justamente en dirección a una pared.
Se desconoce qué fue lo que provocó el error en el sistema. Según una de las versiones, los ingenieros no alinearon las ruedas, al colocar el auto en la línea de salida mientras que el sistema no lo detectó.
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— Roborace (@roborace) October 29, 2020
La idea detrás de Roborace es que cada equipo desarrolle su propio software de conducción autónoma para implementarlo en vehículos idénticos. Actualmente, Roborace usa el prototipo llamado DevBot 2.0.
Aunque la tecnología de asistencia al conductor ha avanzado considerablemente, todavía estamos muy lejos de que los automóviles puedan conducirse solos realmente en la vía pública. Tanto el piloto automático de Tesla como el Super Cruise de Chevrolet, los dos sistemas más avanzados, necesitan la supervisión humana.
