"La lucha contra el terrorismo requiere una coordinación constante de los esfuerzos internacionales y un trabajo permanente para combatir las raíces del extremismo y la violencia", dijo en una declaración al respecto.
La Liga Árabe condenó los ataques en la capital austriaca y lamentó la muerte de inocentes.
Además, destacó que el principal objetivo de esos atentados es la incitación al odio mutuo entre seguidores de diferentes religiones y civilizaciones, añadiendo que los "terroristas no deberían tener la oportunidad de lograr sus objetivos".
Al menos cinco personas fallecieron y 22 resultaron heridas en una serie de ataques perpetrados con armas de fuego en Viena, uno de ellos cerca de una sinagoga.
Uno de los atacantes fue abatido por la Policía, la búsqueda de sus posibles cómplices continúa.