"Una vez más, las manos malvadas de la arrogancia global y sus mercenarios sionistas fueron manchadas con la sangre de otro iraní", dijo Rohani citado por la agencia.
El presidente añadió que lo ocurrido no interrumpirá el "crecimiento científico" del país y sólo hará que los jóvenes científicos estén más decididos a "continuar el camino de este precioso mártir".
Además Rohani aseguró que Teherán responderá al asesinato de su ciudadano.
El líder supremo de Irán, el ayatolá Alí Jamenei, en su cuenta de Twitter instó a llevar a los responsables del asesinato ante la justicia y destacó la importancia de continuar la labor científica de Fajrizade.
Anteriormente, el comandante en jefe del Ejército del país persa, Abdolrahim Musaví, declaró que Estados Unidos podría estar detrás del asesinato.
"Se observa claramente la mano criminal de EEUU y del régimen sionista", señaló Musaví, citado por la agencia ISNA, al subrayar que Irán responderá al asesinato del científico.
A su vez, el ministro de Exteriores iraní, Mohamad Yavad Zarif, afirmó que en el asesinato hay "indicaciones serias de rol de Israel".
La huella israelí
De acuerdo con las declaraciones realizadas por un funcionario estadounidense no identificado y dos fuentes de inteligencia al diario The New York Times, Israel está detrás del asesinato de Fajrizade.
Se desconoce el momento en el que Washington se enteró de la operación y con cuánta antelación. Ambos países son aliados cercanos y comparten inteligencia sobre Irán.
Este 27 de noviembre, el Ministerio de Defensa de Irán informó que el destacado científico nuclear Mohsen Fajrizade murió en el hospital a causa de las heridas que sufrió en el ataque cometido por un grupo de hombres armados.
Fajrizade, llamado en los círculos diplomáticos "el padre de la bomba iraní", fue señalado por el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, en 2018, como el director del proyecto armamentístico nuclear del país persa.
Por su parte, el ministro de Defensa iraní, Amir Hatami, calificó este suceso como un atentado terrorista.
Hatami no es el único alto cargo que se ha pronunciado sobre el asesinato. Así, el ministro de Exteriores iraní, Mohamad Yavad Zarif, afirmó que hay indicios serios de que Israel tuvo un papel en este crimen.
