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Octavo mandamiento
Cuando los principios son irreductibles. Cuando la verdad se abre paso ante una de las más graves pandemias de la actualidad: la de las noticias falsas. Ahí está 'Octavo mandamiento', para revelar lo que otros intentan ocultar.

Triángulo de Weimar, ¿un 'Triángulo de las Bermudas'?

Triángulo de Weimar, ¿un 'Triángulo de las Bermudas'?
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Europa insiste en presentar a Rusia como una amenaza. Gira por Moscú y Pekín del presidente argentino, Alberto Fernández, desquicia a Occidente. 'Putin el terrible', el 'bestseller' de la prensa española. Intelectuales latinoamericanos envían carta a Putin, "gran estadista del siglo XXI". Canadá en llamas. Estos y otros temas en Octavo Mandamiento.

¿Hay razones para esperar avances en el diálogo Rusia-EEUU-Europa?

El presidente de Francia, Emmanuel Macron, tras sostener unas maratonianas conversaciones el lunes en Moscú con su par ruso, Vladímir Putin, el martes se reunió en Kiev con el líder ucraniano, Volodímir Zelenski, y ese mismo día llegó a Berlín para asistir a la reunión del llamado Triángulo de Weimar, que agrupa a Francia, Alemania y Polonia.
En una crónica que tituló "El triángulo de Weimar unido frente a Rusia. Francia, Alemania y Polonia crean un frente común", la cadena Euronews presenta las maniobras rusas como algo que amenaza a Europa, donde, sea dicho de paso, aumenta vertiginosamente la presencia militar de EEUU que traslada a Polonia, Alemania y otros países de la región, contingentes adicionales.
A propósito de las maniobras rusas, Moscú no esconde que se realizan según los planes, como es el caso de los ejercicios de gran envergadura que a partir de este miércoles 9 de febrero y hasta el próximo día 20 realizan conjuntamente Rusia y Bielorrusia.
Euronews ha citado las maniobras de los aviones de combate rusos en el territorio de Krasnodar, cercano a Ucrania. Podemos añadir a eso que también se realizan en el vecino territorio de Stávropol, en el Cáucaso Norte, y la región de Volgogrado, en el sur de la parte europea de Rusia.
Y en referencia a lo que Euronews endilga como "la imagen que genera más inquietud" –los acorazados rusos que se dirigen al mar Negro "para llevar a cabo unas maniobras militares a gran escala", hay que recordar que a finales de enero la Armada rusa anunció que tenía programada una serie de ejercicios navales para enero y febrero de este año.
Las maniobras se llevarán a cabo en las aguas que bañan el territorio de Rusia y en varias zonas importantes de aguas internacionales. Habrá entrenamientos separados en el Mediterráneo, el mar del Norte y en el mar de Ojotsk, así como en el sector noreste del Atlántico y en el Pacífico, informó el pasado 26 de enero la Armada rusa.
En las maniobras, que coinciden con una fuerte escalada de tensión en torno a Ucrania, se implicarán más de 140 buques de guerra y auxiliares, unas 60 aeronaves, casi 10.000 militares y hasta 1.000 piezas de armamento, puntualizó entonces la fuente. Así que no hace falta buscar algo sensacionalista en estos ejercicios militares.
Respecto a la reunión en Berlín del Triángulo de Weimar, la primera en los últimos 11 años, Euronews hizo referencia a las declaraciones de los líderes de Francia, Alemania y Polonia. Así, según Macron, el mandatario ucraniano aceptó empezar a cumplir los Acuerdos de Minsk aprobados en 2014 y 2015, llamados a dar solución al conflicto en el este de Ucrania. Y es que hasta la fecha Kiev ha evitado cumplir los Acuerdos de Minsk, so pretexto de varias causas, al tiempo que Moscú insiste en que es la única vía capaz de acabar con la crisis interna ucraniana.
En la reunión del Trinaguilo de Weimar, el presidente francés dijo que los próximos días y semanas es preciso obtener resultados en dos aspectos clave. "Primero, dar comienzo a una realización verdadera de los Acuerdos de Minsk en el formato del Cuarteto de Normandía [integrado por Alemania, Francia, Ucrania y Rusia]. Segundo, comenzar un diálogo sustancial y elaborar garantías nuevas y aceptables para todos, que garanticen estabilidad y seguridad en toda Europa", dijo Macron. En su opinión, según indicó en su crónica el canal ruso NTV, "el objetivo geopolítico de Rusia no es Ucrania", el propósito de Moscú consiste en "esclarecer las reglas de coexistencia con la OTAN y la UE".
"La OTAN, EEUU y todos nosotros estamos trabajando para crear las garantías en el ámbito de seguridad europea. Estos últimos días han aparecido unas vías nuevas, producto de nuestro trabajo colectivo. Todos, queremos dar continuación al diálogo exigente, siendo fieles a nuestros principios, objetivos y valores, y hablando con Rusia en una voz unida a fin de minimizar los riesgos de cualquier escalada, lograr una desescalada y construir una paz estable", señaló Macron.

EEUU prohíbe a Europa comprar gas ruso: ¿se lo va a tragar?

Un tiro por la culata. Es lo que significaría para Europa el rechazo a gas ruso, un escenario que está promoviendo EEUU, tratando de convencer a sus socios transatlánticos para que cancelen las compras de este hidrocarburo al gigante euroasiático, al tiempo que el blanco numero uno de los esfuerzos norteamericanos en este sentido es el gasoducto Nord Stream 2.
Esta megaobra está lista para incrementar los envíos de gas ruso a Europa, el principal mercado gasístico para Moscú, pero lo que impide su funcionamiento es la injerencia estadounidense, donde el argumento de Washington es que Rusia no es un proveedor fiable y que puede cerrar el grifo en cualquier momento en función de sus intereses.
EEUU no oculta su protagonismo en la campaña contra el Nord Stream 2, utilizando cualquier pretexto para ello. O, mejor dicho, creando estos pretextos. Es así como puede interpretarse el claro empeño norteamericano de agudizar el conflicto en torno a Ucrania para provocar una reacción de Moscú que sirva para potenciar el cuento de una 'Rusia agresiva' y, como consecuencia, justificar el cese de las compras de su gas. Se trata, por ejemplo, del desprecio de Washington a las líneas rojas marcadas por el Kremlin, entre ellas el ingreso de Ucrania a la OTAN.
Otro elemento en esta dirección son los envíos de armas norteamericanas al régimen de Kiev. Según el viceministro de Exteriores ruso, Serguéi Riabkov, se trata de los suministros de "municiones, equipos militares, incluidas armas letales", al tiempo que hay informes que hablan del posible despliegue en Ucrania de sistemas antimisiles THAAD. Al respecto, el diplomático ruso manifestó que, "si algunas cabezas calientes van en esa dirección, tomando ideas similares en serio, reducirán aún más las posibilidades de resolver de forma política y diplomática la crisis que surgió por culpa de EEUU y sus aliados en el extenso territorio a lo largo de la línea de contacto con Rusia".
Cabe señalar que la militarización de Ucrania es parte de la militarización de Europa del Este por parte de EEUU y sus aliados, algo que afecta la seguridad de toda la zona de responsabilidad de la Organización del Tratado de la Seguridad Colectiva, tal y como acaba de manifestar el secretario general de este organismo, integrado por Armenia, Bielorrusia, Kirguistán, Rusia, Tayikistán y Kazajistán.
Una situación explosiva que responde a los intereses de Washington, donde los pasos de Rusia para proteger su seguridad son presentados por EEUU y la prensa hegemónica como una contundente muestra de la urgente necesidad de romper todos los lazos con Moscú, entre ellos los en materia energética. En este contexto, las declaraciones del presidente, Joe Biden, quien amenazó con detener el Nord Stream 2 si el mandatario ruso, Vladímir Putin, ordena una invasión de Ucrania, son más que reveladoras. Lo dijo durante una rueda de prensa conjunta con el nuevo canciller alemán, Olaf Scholz, quien, por su parte, evitó aclarar si está dispuesto a suspender los permisos para este gasoducto.
Al mismo tiempo, tal y como se desprende de las declaraciones de una alta representante de la Administración estadounidense, Washington seguirá gestionando el bloqueo al Nord Stream 2 independientemente de si se produce o no la invasión rusa a Ucrania. Y es que se trata de un proyecto geopolítico "que está socavando la seguridad nacional y energética de una gran parte de la comunidad euroatlántica", afirmó la funcionaria.
Paralelamente, Washington se ofrece para 'salvar' a Europa ante su dependencia energética de Rusia. El secretario de Estado del país norteamericano, Antony Blinken, acaba de reafirmar que su país "hará todo lo posible para ayudar a atenuar el impacto de cualquier interrupción en la distribución de energía a Europa", algo que, según sus palabras, ya se está haciendo, donde Washington está en conversaciones con Gobiernos y grandes productores en todo el mundo para que sustituyan los suministros rusos. "Coordinamos con nuestros aliados y las partes interesadas del sector energético la mejor manera de compartir las reservas de energía en caso de que Rusia cierre la espita o inicie un conflicto que interrumpa el flujo de gas a través de Ucrania", manifestó.
Mientras, la agencia de calificación S&P Global Ratings acaba de constatar en su informe que "una reducción en el suministro de gas de Rusia a Europa sería difícil de compensar". Asimismo, se subraya en el reporte que no se prevé que Moscú imponga una restricción a la exportación de gas a sus socios europeos, dado los beneficios redituables que obtiene de este negocio, sin que tampoco pueda redireccionar los suministros de sus principales centros de producción a otros mercados. Es decir, lo que dice el informe es es un hipotético corte por Rusia de sus suministros gasísticos a Europa es un bulo.
Un bulo inventado por EEUU. Lo señaló claramente el vicanciller de Exteriores ruso, Serguéi Riabkov, quien denunció que el Nord Stream 2 "se convirtió hace mucho tiempo, en manos de Washington y de algunas figuras fuera del país norteamericano, en un instrumento para presionar a Moscú". Ante ello, subrayó que en la UE no existe ninguna independencia ni se observa ningún intento de valorar sus intereses propios.
No obstante, algunos políticos comunitarios sí se atreven a manifestarse a favor de seguir comprando gas a Rusia. Entre ellos se encuentra el ministro de Asuntos Exteriores de Italia, Luigi di Maio, quien dijo que "Moscú sigue siendo indispensable para poder asegurar los flujos de suministros para toda Europa". Al mismo tiempo, enfatizó que "Rusia también depende en gran medida de los ingresos de las exportaciones de energía y Europa es su mejor mercado".
El que Rusia sea un socio energético fiable lo ha llegado a reconocer hasta el propio señor Josep Borrell, jefe de la diplomacia europea, quien es además conocido por su postura muy crítica con Moscú. Pero incluso él escribió en su blog que Rusia cumple a rajatabla sus compromisos contractuales en cuanto a las entregas de gas. Algo que, no obstante, no le impide seguir insistiendo en la necesidad de buscar proveedores alternativos:
Mientras tanto, el embajador de Rusia ante la Unión Europea, Vladímir Chizhov, advirtió que la compañía Gazprom exportará el gas a otros países en caso de que Bruselas renuncie al gasoducto Nord Stream 2. Concretamente, dijo lo siguiente: "Los consumidores europeos son los que necesitan el Nord Stream 2 más que Rusia ya que nosotros hallaremos a quien venderle el gas si imaginamos hipotéticamente el bloqueo definitivo de ese ducto". Asimismo, Chizhov aseguró que Rusia podría aumentar el suministro de gas a los países europeos si recibe solicitudes correspondientes.

'Putin el terrible', el cuento 'bestseller' de la prensa española

A juzgar por la narrativa de los grandes medios españoles, la 'mano de Moscú' es omnipresente, siendo el mandatario ruso, Vladímir Putin, el gran culpable, tanto de los problemas nacionales, como globales. Un cuento que desgraciadamente sí ha calado en la población, tal como constató a Sputnik la socióloga gallega Celia Fernández.
La experta verificó que, tal y como sostienen al unísono los titulares, "Rusia está gobernada por una persona igual a Hitler", alertándose durante meses de su 'inminente' invasión a Ucrania.
"En esa imagen de la 'Rusia invasora' hay artículos que se preguntan quién va a frenar a Rusia. Pero la pregunta que no ha planteado, ni ha contestado ninguno de estos artículos, es qué busca Rusia con invadir a Ucrania", subrayó Fernández, indicando que este hecho deja al desnudo la ausencia de argumentos de los autores de esta histeria mediática, una ausencia que intentan tapar con un alarmismo extremo.
Señaló que tampoco se explica el porqué de los supuestos planes del Kremlin de provocar la independencia catalana, afirmándose en su momento que Putin barajaba enviar 10.000 soldados en apoyo a la causa independentista.
Otro tema 'de moda' son los hipotéticos planes de Rusia de cortar sus suministros energéticos a Europa, sin que se entiendan los beneficios de este paso, dado que se trata del principal mercado para las exportaciones de gas ruso, apuntó Fernández.
Entre otras mentiras de esta "propaganda", mencionó también los ataques contra la vacuna anticovid rusa Sputnik V. Según la experta, la campaña antirrusa es como dos gotas de agua con la que se llevó a cabo contra Irak, Libia o Siria, o la que están afrontando países como Venezuela.
"Una campaña que va en contra de los intereses de la ciudadanía española, la gran perjudicada de esta jugada protagonizada por EEUU", concluyó Fernández.

Intelectuales latinoamericanos remiten una carta a Vladímir Putin, "gran estadista del siglo XXI"

La resistencia de Rusia ante las presiones de Occidente –una campaña que incluye, desde la propaganda mediática, hasta el asedio militar por parte de la OTAN– genera cada vez más simpatía hacia Vladímir Putin. De hecho, Sputnik acaba de acceder a una carta de solidaridad remitida al líder ruso por un grupo de intelectuales latinoamericanos.
La misiva está firmada por el sociólogo peruano Carlos Mamani Aliaga, director y conductor del espacio de reflexión crítica y estratégica Proyecto Patria, donde se expresa la "solidaridad" y el "total apoyo" a una Rusia "asediada" por EEUU y "sus subordinados atlantistas", a la vez que se resalta la "inclaudicable lucha" del gigante euroasiático por "la construcción de un mundo multipolar".
Una lucha que, según los autores del mensaje, convierte a Rusia "en un insoslayable faro para los pueblos del mundo", donde Occidente, en su estrategia para "impedir a toda costa el irreversible ascenso de la multipolaridad", se dedica a sembrar "el caos, el terror y la muerte alrededor" del planeta.
En declaraciones a Sputnik, Mamani Aliaga expresó su rechazo ante el "paroxismo de la prensa occidental" ante la figura del jefe del Kremlin, llegándose a los extremos de "compararlo con Hitler", mientras que la verdad es que se trata de un "gran estadista del siglo XXI" que lo que hace es "defenderse de las pretensiones expansionistas del mundo anglosajón".
"Vemos en el presidente Vladímir Putin a uno de los muy pocos estadistas en el mundo que está defendiendo el principio de soberanía nacional, tanto a nivel de la protección del territorio, los recursos o la población, como también a nivel de valores espirituales como las creencias, las costumbres, las tradiciones, la familia, la religiosidad popular y la identidad nacional", manifestó.
Según el director de Proyecto Patria, esto hace que "Putin tenga un reconocimiento entre muchos latinoamericanos de buena fe y de buen corazón", donde la región mira cada vez más hacia Rusia como un socio alternativo ante el desastre que trae el relacionamiento con EEUU y organizaciones bajo su control como el Banco Mundial o el Fondo Monetario Internacional, siendo su estrategia endeudar a los países de Latinoamérica a fin de hacerse con su soberanía y, como consecuencia, con sus ricos recursos naturales.
Invitamos a los oyentes de Octavo Mandamiento a compartir sus opiniones sobre los acontecimientos más importantes en sus países, enviando mensajes de voz de un máximo de dos minutos al WhatsApp del programa: +7 968 766 28 74.
El equipo del programa está integrado por Javier Benítez, Víctor Sújov y Víctor Ternovsky.
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