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"Me van a juzgar, pero todavía falta que nos juzgue la historia": AMLO recuerda su gran discurso

© Foto : Facebook / Andrés Manuel López ObradorAndrés Manuel López Obrador, actual presidente de México, durante el discurso que pronunció en 2005 ante la Cámara de Diputados
Andrés Manuel López Obrador, actual presidente de México, durante el discurso que pronunció en 2005 ante la Cámara de Diputados  - Sputnik Mundo, 1920, 08.04.2022
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El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, recordó que hace 17 años ofreció uno de sus discursos más emblemáticos, el cual ha sido catalogado como uno de los más importantes en la historia reciente del progresismo de América Latina.
A partir de ese discurso, se consolidó en México el obradorismo, un movimiento social y político que culminaría en el primer Gobierno de izquierda en la historia de este país latinoamericano.
Tras pronunciar aquellas palabras el 7 de abril de 2005 ante la Cámara de Diputados, la prensa internacional reaccionó como nunca sobre un líder izquierdista. El diario estadounidense The Washington Post calificó en aquella ocasión a Andrés Manuel López Obrador como "un guerrero de las clases" y "un campeón incansable de los menos privilegiados".
Esa tarde, con un gran apoyo popular, el entonces jefe de Gobierno de la Ciudad de México ingresó al Congreso para enfrentar a los diputados que estaban decididos a retirarle el fuero constitucional para que pudiera ser juzgado por un pleito legal administrativo y, de esa forma, evitar que contendiera por la Presidencia de la República.
Según López Obrador, el desafuero en su contra tenía un objetivo: evitar que un político de izquierda, como él, llegara a Palacio Nacional. Todo por voluntad, dijo, del entonces presidente Vicente Fox y de un grupo de políticos y empresarios neoliberales que se negaban a entregar el poder. Amplios sectores de la sociedad mexicana y de la prensa nacional e internacional rechazaron la decisión de desaforar al tabasqueño. Alegaban que era un atentado contra la democracia.

"Comparezco con dignidad ante este tribunal por el juicio de desafuero en mi contra. Muy poco voy a argumentar en términos jurídicos sobre la falsedad de este juicio. Tengo la certeza absoluta de que no se me juzga por violar la ley, sino por mi manera de pensar y actuar y por lo que pueda representar, junto con otros mexicanos, para el futuro de nuestra patria", dijo López Obrador ese 7 de abril de 2006.

Adentro, en la Cámara de Diputados, algunos legisladores del Partido Revolucionario Institucional (PRI) y del Partido Acción Nacional (PAN) le gritaron: "¡Fuera, fuera!". Incluso la priista Sofía Castro injurió: "¡Muera el Peje!", en alusión al apodo del tabasqueño.
Afuera del recinto legislativo, sin embargo, las movilizaciones populares respaldaban al jefe de Gobierno capitalino.
López Obrador prosiguió: "Quienes me difaman, calumnian y acusan son los que se creen amos y señores de México, son los que en verdad dominan y mandan en las cúpulas del PRI y del PAN. Son los que manejan el truco de llamar populismo o paternalismo a lo poco que se destina en beneficio de las mayorías, pero nombran fomento o rescate a lo mucho que se entrega a las minorías rapaces. Son ellos los que tienen mucho miedo a que el pueblo opte por un cambio verdadero".
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También habló sobre conceptos como la necesidad de pactar "una nueva convivencia social" y la urgencia de consolidar "la patria para el humillado", una frase muy similar a su actual consigna de "primero los pobres", ahora que ya es presidente.
Asimismo, acusó directamente a un grupo de oligarcas de utilizar al presidente Vicente Fox en su contra. "Este desafuero fue tramado desde los Pinos", aseguró.

"Ustedes me van a juzgar, pero no olviden que todavía falta que a ustedes, y a mí, nos juzgue la historia. ¡Viva la dignidad! ¡Viva México!", fueron las palabras con las que Andrés Manuel López Obrador concluyó su discurso.

Ese día, los legisladores mexicanos decidieron desaforarlo. Sin embargo, las constantes y masivas marchas populares echaron para atrás los intentos de evitar que contendiera para la Presidencia de la República. El líder de izquierda, al final, sí fue candidato en 2006, pero perdió ante el panista Felipe Calderón en medio de acusaciones por fraude electoral. En 2012 volvió a contender, sin éxito. Triunfó el priista Enrique Peña Nieto.
Durante 13 años, López Obrador jamás volvió a poner un pie en la Cámara de Diputados hasta el 1 de diciembre de 2018, cuando se convirtió en presidente constitucional de los Estados Unidos Mexicanos.
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