Viena, 28 de junio, RIA Novosti. La práctica del doble rasero usada por algunos países y el dominio de los intereses de grupos y alianzas sobre los objetivos paneuropeos se han erigido en principales escollos que impiden reforzar la dimensión política y militar de la OSCE, afirma Mikhail Ulianov, subdirector del departamento para la seguridad y el desarme en el Ministerio de Exteriores ruso.
Para restablecer una cooperación eficaz en el marco de la OSCE, se requiere dar una muestra de voluntad política y, en cierto grado, revisar el equilibrio entre los intereses nacionales y los de la seguridad colectiva.
La OSCE, en opinión del diplomático ruso, sigue distanciándose cada vez más de la solución de problemas clave en materia de seguridad y prefiere ocuparse de asuntos secundarios y marginales, cuando no simplemente crear las apariencias de una labor práctica.