Moscú, 1º de febrero, RIA Novosti. La religión ortodoxa y la industria nuclear son dos componentes que, en opinión de Putin, refuerzan al Estado ruso.
Las dos últimas preguntas dirigidas al presidente de Rusia en una rueda de prensa que tuvo lugar en el Kremlin venían de una reportera de Sarov, ciudad con una fuerte presencia de centros nucleares y vinculada históricamente con San Serafín, uno de los santos más venerados por la Iglesia Ortodoxa.
La periodista quería saber qué lugar le ve Putin a la religión ortodoxa en la futura evolución del país y cuál será la estrategia respecto al sector nuclear.
‘Ambos temas guardan una relación estrecha entre sí porque tanto la confesión tradicional de Rusia como su escudo nuclear son las componentes que refuerzan el Estado y generan las premisas necesarias para garantizar nuestra seguridad interna y exterior - contestó Putin -. De aquí, una conclusión obvia sobre la actitud que el Estado deber mantener hacia lo uno y lo otro, tanto ahora como a futuro'.