Moscú, 24 de agosto, RIA Novosti. Serán los peritos forenses de la oficina regional con sede en Ekaterimburgo quienes se encargarán de identificar los restos mortales hallados cerca de esta ciudad y que, hipotéticamente, podrían ser de los familiares del último zar ruso Nicolás II, comunicó la Fiscalía General de Rusia.
Se trata de fragmentos de dos cuerpos que, según la versión previa, son de un niño de 10-14 años y de una joven veinteañera, con signos de muerte violenta.
"En la actualidad, se está barajando la versión de que los restos hallados son del príncipe heredero Alexei Nikolaievich Románov y de la gran princesa María Nikolaievna Románov, fusilados en Ekaterimburgo en la noche del 16 al 17 de julio", consta en un comunicado publicado en la web de la Fiscalía.
A raíz del descubrimiento, hecho en julio pasado, la Fiscalía decidió reanudar la investigación abierta en 1991, tras el hallazgo de los restos mortales de la familia real.
Guerman Lukiánov, quien aboga por la rehabilitación política de los Románov por encargo de la gran duquesa María Románov, residente en España, cree que es prematuro aún para hacer conjeturas y cuestiona que los restos hallados en 1991 sean de la familia real.
La reapertura del sumario, según él, "no influirá en modo algunos sobre el tema de la rehabilitación, puesto que la Fiscalía General no puede anular la decisión de un régimen totalitario sobre la ejecución del zar y sus familiares".
