Tel Aviv/ Gaza, 26 de octubre, RIA Novosti. El primer ministro de Israel, Ehud Olmert, ha prometido no admitir que se produzca una crisis humanitaria en el sector Gaza, a pesar de la intención de Israel de reducir los suministros de energía eléctrica al enclave palestino como respuesta a los ataques coheteriles, informa la agencia AP, alegando una fuente gubernamental anónima.
Olmert ha celebrado este viernes en su residencia de Jerusalén una ronda ordinaria de negociaciones con el cabeza de la Autoridad Nacional Palestina, Mahmud Abbas, debatiendo con él tanto el tema del arreglo definitivo en el contexto de preparación de la reunión multipartita, que se prevé realizar en EEUU, como cuestiones de relaciones corrientes entre Israel y los palestinos.
"La decisión del Gobierno de Israel de disminuir suministros al sector Gaza no puede ser aceptada ni comprendida por la parte palestina. Israel no debe utilizar las necesidades humanitarias de los palestinos para lograr sus objetivos, ni tampoco como un medio de ejercer presión sobre el adversario", citó las palabras de Abbas uno de sus ayudantes, al responder a las preguntas de los periodistas al término de la reunión entre dos líderes.
El ministro de Defensa de Israel, Ehud Barak, aprobó la víspera la reducción de los suministros de electricidad y combustible al sector Gaza como una reacción a los ataques extremistas.
Las autoridades palestinas califican esas sanciones como un "castigo colectivo" a toda la población de 1,5 millones del enclave y exhortan a la comunidad mundial a inmiscuirse.
