Roma, 22 de mayo, RIA Novosti. La alcaldesa de Nápoles, Rosa Russo Iervolino, expresó satisfacción por las medidas que adoptará el Gobierno de Silvio Berlusconi para solucionar el problema de la basura en Nápoles y toda la región meridional de Campania, informó hoy la prensa.
El problema surgió en la región hace más de 10 años. Los analistas vinculan las raíces de ese mal con la actividad de la mafia napolitana (camorra), la que no está interesada en dar solución al problema, pues gana mucho procesando ilegalmente los desechos. Según testigos, en Nápoles ya no queda ni un barrio en que no haya gigantescos montones de basura. Los médicos temen seriamente el surgimiento de epidemias en la ciudad.
La víspera, en Nápoles se celebró una reunión del Consejo de Ministros, al término de la cual se dieron a conocer las medidas que se prevé tomar. En particular, se ha decidido crear siete vertederos nuevos, cuyos accesos se protegerán por Ejército. Los que protesten contra su apertura y organicen manifestaciones, correrán el riesgo de verse en la cárcel por un año. A los organizadores de desordenes les amenaza la privación de libertad de hasta cinco años.
Berlusconi prometió también construir cuatro plantas de procesamiento de basura en la región. La primera tiene que ponerse en explotación en el transcurso de un año.
