Washington, 10 de agosto, RIA Novosti. Los candidatos a la presidencia de Estados Unidos, el republicano John McCain y el demócrata Barak Obama criticaron hoy a Rusia por enviar sus tropas a Osetia del Sur tras conversar por separado con el presidente de Georgia, Mijail Saakashvili.
"Le comunique al presidente Saakashvili mi profunda alarma por la situación que atraviesa el pueblo Georgiano", dijo una declaración de Obama difundida por su equipo de campaña electoral.
En su comunicado, el candidato no mencionó la situación en Osetia del Sur que afronta una catástrofe humanitaria después de que el ejército georgiano ocupara su territorio el pasado viernes y atacara Tsjinvali su capital y otros poblados con artillería pesada, misiles múltiples "Grad", tanques, bombardeos con aviones de combate, y francotiradores que dispararon contra la población civil.
Obama se manifestó a favor del cese inmediato del fuego. "Rusia debe suspender sus bombardeos y los vuelos sobre el espacio aéreo de Georgia y retirar a sus tropas de Georgia".
La declaración del candidato de cara a los electores estadounidenses evitó comentarios sobre la capital suroseta Tsjinvali que a consecuencia de las bombardeo georgiano quedó prácticamente destruida, el número de muertos entre la población civil asciende a 2.000 personas, otros tantos miles resultaron heridos y los refugiados se contabilizan en decenas de miles.
Por su parte, McCain dijo que la situación en Georgia era "horrible", porque Rusia continúa su agresión con ataques fuera del territorio de Osetia del Sur.
"La tensión y los enfrentamientos armados entre georgianos y surosetas en ninguna manera pueden justificar que las tropas rusas crucen las fronteras de Georgia que cuentan con el reconocimiento internacional", subrayó el candidato republicano.
Simultáneamente a los ataques indiscriminados contra la población civil, el ejército georgiano también atacó las posiciones de las Fuerzas de paz rusas emplazadas en el territorio suroseta desde 1992 en cumplimiento de acuerdos de paz suscritos entre Georgia y Osetia del Sur y avalados por Rusia.
En defensa de la población civil y las fuerzas de paz rusas, Moscú envió a Osetia del Sur unidades del ejército 58 en cumplimiento de acuerdos internacionales vigentes, entre ellos un tratado suscrito en 1999, que además de conferir a Rusia la función de fuerza de paz, constató la obligación de defender a la población civil en el caso de una violación del alto al fuego por una de las partes.
"De nuevo hago un llamamiento al gobierno de Rusia para que de forma inmediata y sin condiciones retire sus tropas del territorio de Georgia", resaltó McCain.
Ayer, el primer ministro de Rusia, Vladimir Putin acusó a Georgia de haber cometido un genocidio en Osetia del Sur y afirmó que el envió de tropas rusas al territorio suroseta fue una decisión "absolutamente necesaria y legítima desde el punto de vista jurídico".
A juicio de Putin, al encomendar al ejército georgiano aniquilar la población suroseta, el Gobierno de Georgia antes que todo, asestó un golpe mortal contra la integridad territorial del propio país.
"Después de todo lo que ha pasado y ha ocurrido en el suelo suroseta, cuesta imaginar como será posible persuadir a Osetia del Sur para que acepte formar parte del estado georgiano", subrayó Putin.
Según Putin, la comunidad internacional debe reflexionar si vale la pena confiar en el gobierno georgiano que se autodefine como modelo democrático, y al mismo tiempo utiliza misiles destinados al campo de batalla (Grad) para destruir viviendas ocupadas por la población civil.
"Pienso que ahora en Georgia, Rusia y el resto del mundo quedó claro que la aspiración de Georgia de ingresar en la OTAN no es para formar parte de un sistema de seguridad internacional sino para arrastrar a otros países a ser cómplices de sus planes sangrientos", resaltó el primer ministro ruso.
