El Servicio Federal de Vigilancia de Fronteras (que se subordina al Servicio Federal de Seguridad, FSB) tomará bajo su protección las fronteras de Abjasia y de Osetia del Sur. El Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia ha informado de que sendos acuerdos con estas dos repúblicas caucásicas serán suscritos tan pronto la Duma de Estado (cámara baja del parlamento ruso) ratifique los tratados de amistad, cooperación y ayuda mutua con Abjasia y de Osetia del Sur, sometidos ayer a consideración del Legislativo por el presidente ruso Dmitri Medvédev.
Estos documentos revisten mucha importancia para Rusia por ofrecer amplios horizontes para la cooperación militar.
Por ejemplo, ambos acuerdos (cuyos textos son prácticamente idénticos) estipulan el derecho de cada una de las partes a construir y utilizar en el territorio de la otra bases militares y otras instalaciones infraestructurales. Huelga decir que en un futuro visible ni Abjasia ni Osetia del Sur difícilmente tengan planes de instalar bases militares suyas en el territorio ruso. En cambio, todavía a comienzos de septiembre pasado, el ministro de Defensa ruso, Anatoli Serdiukov, informó al presidente Dmitri Medvédev de que el tema de acuartelamiento de 3.800 efectivos rusos en Abjasia y Osetia del Sur fue consensuado con los dirigentes de estas dos repúblicas soberanas.
Moscú no pierde tiempo y pronto planea aprovechar otra posibilidad estipulada en los tratados de amistad, a saber, tomar bajo su control toda la extensión de las fronteras de Abjasia y Osetia del Sur, incluidos los tramos limítrofes con Georgia.
"Lo organizaremos todo igual como con Armenia. La vigilancia de las fronteras supondrá financiación y prestación de servicio conjuntas", manifestó ayer a Kommersant un funcionario de la cancillería rusa. Si algún día Abjasia u Osetia del Sur resuelven proteger sus fronteras por cuenta propia, los militares rusos, por supuestos, se retirarán, prometió el diplomático.
Abjasia y Osetia del Sur, cuyos parlamentos ya ratificaron los tratados de amistad con Rusia, esperan con impaciencia a los guardafronteras rusos. "Su llegada contribuirá a reforzar la seguridad de nuestros Estados", se muestra convencido, Gari Kupalba, viceministro de Defensa de Abjasia. "Nuestra frontera será protegida por los rusos. Era necesario hacerlo antes de la agresión georgiana -manifestó Irina Gaglóeva, responsable del comité de información y prensa en el Gobierno de Osetia del Sur-. La ineficacia de los observadores internacionales está a la vista, evidentemente nuestra frontera ha de ser reforzada".
Diputados rusos prometen ratificar los tratados ya el viernes próximo.
