ONU, 12 de noviembre, RIA Novosti. Abdalá, rey de Arabia Saudí, y Shimon Peres, presidente de Israel, pronunciaron hoy discursos en la ONU en que exhortaron por la paz y la comprensión mutua entre diversas culturas y religiones.
La participación en el Diálogo entre las Religiones y las Civilizaciones del monarca saudí y el presidente del Estado judío es por poco la causa principal de una elevada atención que se dedica a ese foro, que se inauguró hoy en la sede de la ONU de Nueva York, en el marco de la 63 sesión de la Asamblea General. Pues de las posiciones que mantienen Arabia Saudí e Israel depende en mucho grado el logro de la paz en Oriente Próximo.
"Nuestra aspiración a mantener diálogo hunde sus raíces en la fe y los valores islámicos (...). Proseguiremos aquello que ya hemos empezado, lo de tender nuestra mano a todos los partidarios de la paz, la justicia y la tolerancia", declaró el rey de Arabia Saudí, refiriéndose obviamente a la iniciativa de lograr el arreglo arabo-israelí, la que promovió su país.
Shimon Peres también se refirió a esa iniciativa, aplaudiéndola. Según el presidente israelí, con ello ante Oriente Próximo se abre una perspectiva que "infunde esperanza y seguridad a los pueblos y Estados".
Peres dijo asimismo que Israel comparte las ideas de que el conflicto arabo-israelí no tiene solución militar, que hace falta lograr paz universal en Oriente Próximo, concertar un convenio de paz entre Israel y los países árabes, cesar el derramamiento de sangre y establecer relaciones de buena vecindad entre el Estado judío y los países musulmanes de la región, en aras de la prosperidad y la seguridad de las futuras generaciones.
