Berlín, 19 de noviembre, RIA Novosti. La crisis financiera global obliga al grupo químico alemán BASF suspender por un tiempo la producción en 80 plantas y reducirla considerablemente en otras cien, informó hoy el consorcio.
BASF cuenta con unas 400 empresas instaladas por todo el mundo.
"Ya en octubre sentimos la difícil situación económica cuando cayó la demanda de nuestros clientes en los grandes mercados", comentó el presidente de BASF, Jürgen Hambrecht.
Señaló que sobre todo disminuyó la demanda de los clientes en la industria automovilística.
Las reducciones afectarán a 20.000 empleados, pero BASF aplicará las formas "flexibles" de reparto de las horas de trabajo. En total hay unas 95.000 personas en el mundo que trabajan para ese grupo alemán.
El año pasado BASF facturó 58.000 millones de euros.