Moscú, 3 de julio, RIA Novosti. La justicia francesa emitió hoy el fallo sobre la custodia de Elise Belenkaya-Andre, la niña de doble ciudadanía, ruso-francesa, por el cual permitió a la madre rusa entrevistarse con su hija tres veces al mes en ausencia del padre, ciudadano de Francia, informó a RIA Novosti Grigori Renkurt, abogado de Irina Belenkaya.
Según el abogado, el tribunal rechazó la exigencia del padre sobre su presencia obligatoria en tales 
encuentros.
Al comentar el fallo, Irina Belenkaya dijo este viernes a la cadena de TV rusa "Vesti" que "el juez decidió que sería suficiente que la niña vez a su madre sólo tres veces al mes". Según sus palabras, ella "estaba preparada para tal fallo y lo recurrirá".
Renkurt considera que próximamente serán ampliados los derechos de la madre de contactar con su hija, restringidos hoy por la justicia francesa.
El abogado indicó que de momento, Elise seguirá viviendo en casa de su padre.
Los abogados del padre se mostraron satisfechos con la decisión judicial, al destacar que André seguirá compartiendo la casa con su hija.
Anteriormente, los abogados de Belenkaya explicaron que el fallo del 3 de julio sobre la patria potestad de la madre tendrá el carácter preliminar y con vigor hasta que sea concluido el procedimiento de divorcio, después de lo cual el tribunal de nuevo determinará el lugar de residencia de Elise y resolverá el asunto relativo a su educación.
La parte rusa pedía al juez conceder a los padres -al francés Jean-Michel André y a la rusa Irina Belenkaya- los derechos iguales de patria potestad, conforme al acuerdo que la madre firmó en Budapest el 6 de mayo pasado.
La niña de doble ciudadanía, ruso-francesa, en los últimos dos años ha sido secuestrada en tres ocasiones y se ha convertido en moneda de cambio de su madre Irina Bélenkaya, ciudadana rusa, y el francés Jean-Michel André, actualmente divorciados.
Tras formalizar la separación, Bélenkaya viajó con su hija a Rusia, donde un tribunal dictaminó que Elise podía permanecer bajo la tutela de su madre. Pero el ex esposo logró lo mismo de la Justicia francesa y en otoño de 2008 secuestró a la pequeña en Moscú y de forma ilegal, al no contar con la autorización de su madre, viajó con Elise a Francia.
Viviendo con su padre en Francia, Elise fue secuestrada a finales de marzo por tres desconocidos. El ex esposo declaró a la policía haber reconocido en uno de los secuestradores a Bélenkaya y en consecuencia, las autoridades francesas emitieron por Interpol una orden de búsqueda y captura contra Bélenkaya como presunta cómplice del secuestro.
Bélenkaya y Elise fueron detenidas en Hungría, en la frontera con Ucrania. Las autoridades húngaras informaron inmediatamente sobre la detención al padre francés, quien arribó a Budapest, donde le fue entregada la niña. El tribunal húngaro extraditó a Bélenkaya a Francia.
