- Sputnik Mundo
Internacional
Todas las noticias mundiales en un mismo portal informativo. Sigue de cerca lo que pasa en diferentes regiones del planeta.

LA FEDERACIÓN DE RUSIA ENTRE AGOSTO 2008 Y JULIO 2009

Síguenos en
El período comprendido entre el 1 de agosto 2008 y el 31 de julio 2009 muestra una intensa actividad por parte de la Federación. Desde marzo 2008 el presidente era Dmitri Medvedev y su primer ministro el presidente saliente, Vladimir Putin.

Isabel Stanganelli

"Rusia nunca es tan poderosa

ni tan débil como parece".

Talleyrand

 El período comprendido entre el 1 de agosto 2008 y el 31 de julio 2009 muestra una intensa actividad por parte de la Federación. Desde marzo 2008 el presidente era Dmitri Medvedev y su primer ministro el presidente saliente, Vladimir Putin. El 6 de julio de 2009 se reunieron en Moscú con el nuevo presidente de EEUU, Barak Obama. Esa cumbre alcanzó un acuerdo para reducir los arsenales nucleares de ambos países en más de una tercera parte -el mayor recorte jamás pactado-, pero dejó pendientes asuntos fundamentales, como el sistema antimisiles en el Este de Europa que Washington intenta instalar. Al respecto, EEUU sostiene que son necesarios para contener el peligro que implicaría Irán, pero para Moscú encubren una agresión directa contra la Federación. Aunque Obama se muestra menos entusiasta sobre esta cuestión y sobre la ampliación de la OTAN en las ex soviéticas Georgia y Ucrania que su predecesor, estos temas permanecen en su agenda. Para la del Kremlin, el sistema de misiles en Europa Oriental y la extensión de la OTAN no son cuestiones negociables.

Tampoco en la cumbre Medvedev-Obama se lograron acuerdos económicos. Y por si quedan dudas, la reunión de ambos presidentes se extendió a 15 minutos, en tanto la celebrada entre Obama y Putin duró una hora y media. Al respecto hubo serias dificultades previas relativas al protocolo establecido por EEUU que contemplaba reuniones entre los presidentes y simultáneamente del vicepresidente de EEUU, Biden, con Vladimir Putin. Esto produjo serias objeciones desde Rusia, pues Vladimir Putin no es un  vicepresidente. Finalmente acompañaron a los presidentes Hillary Clinton y el ministro de Asuntos Exteriores ruso Sergei Lavrov. A pesar de los ejercicios militares de la OTAN en la caucásica república de Georgia y de la intervención humanitaria ordenada por el Kremlin en esa república en agosto 2008, ambos presidentes acordaron que Rusia permitiría el sobrevuelo de su territorio a naves con material militar con destino a Afganistán. Hasta ese momento Rusia solo permitía el envío por su territorio de materiales no letales y por tren con destino a Kabul. Se debe tener presente que en ese momento EEUU, que había perdido sus bases en Uzbekistán en 2005, negociaba arduamente su permanencia en la base Ganci/Manas en Kyrgyzstán y su situación en Pakistán era altamente inestable.

Respecto de la escalada militar entre Rusia y Georgia en agosto 2008, la primera reacción de muchos medios occidentales -y funcionarios de diversos Estados- ante la guerra desatada entonces, fue considerar que una agresiva Rusia, sin causa, sofocaba la creciente democracia georgiana. La presunción de culpabilidad de Moscú puede haber sido la causa del frío recibimiento del presidente Obama a su arribo a Rusia, cuando en otras ciudades había sido aplaudido.

Antes de la guerra de agosto 2008, dos misiones de observación de la paz estuvieron presentes en Georgia, la de la OSCE y la de la ONU para Abkhazia (UNOMIG). Su mayor vulnerabilidad era la dependencia técnica y logística de Rusia, que era, al mismo tiempo, una Parte en el conflicto. Por esta razón, luego de 2006, las misiones no estaban en posición de prevenir la escalada de incidentes fronterizos, la concentración de tropas rusas en el Cáucaso en 2008, el ataque de tropas georgianas a Tskhinvali -capital de Ossetia del Sur- la noche del 7 a 8 de agosto 2008, ni la ofensiva rusa y la ocupación de partes adicionales de Georgia. La misión de la UE, a cargo desde el 1° de octubre de 2008 (EUMM), logró acceder a áreas controladas por las repúblicas separatistas desde ese día.

A pesar de estas limitaciones, las misiones jugaron un importante rol, especialmente luego de la guerra de 2008, cuando resultó obvio que la disputa esencialmente era georgiano-rusa y no entre el gobierno central georgiano y las autoridades de Abkhazia y Ossetia del Sur. Durante discusiones multilaterales sobre la seguridad y estabilización de Georgia, conducidas desde octubre 2008 en Ginebra bajo los auspicios de la OSCE, ONU y UE, la comunidad internacional mantuvo su soporte a la integridad territorial georgiana, en contraste con la posición de Rusia que, el 29 de abril de 2008, reconoció la independencia de Abkhazia y Ossetia del sur.

En Ginebra, la diplomacia rusa intentó inclinar a Georgia a firmar un acuerdo de renuncia al uso de la fuerza con las autoridades de las dos repúblicas separatistas, algo que había significado el reconocimiento de facto por Georgia de la subjetividad de Abkhazia y Ossetia del Sur bajo la ley internacional. Al sostener el argumento de la independencia de ambas provincias, Rusia también buscó dividir a las misiones de la OSCE y ONU en Abkhazia y Ossetia del Sur. Los intentos por llegar a un entendimiento no resultaron, lo que favoreció la expiración del mandato de la misión UNOMIG el 15 de junio de 2009 y de la OSCE el 30 de junio de 2009. Curiosamente, actualmente hay 246 observadores de la EEUU en Georgia, y el mandato de su misión expirará el 30 de septiembre de 2009. La extensión del mandato es posible y Rusia no cuenta con medios legales para evitar que Estados de la UE lleguen a un acuerdo al respecto.

Entre el 29 de junio y el 6 de julio de 2009, Rusia condujo ejercicios militares en la región ("Kavkaz 2009") con la participación de 8.500 efectivos, 200 tanques, 250 piezas de artillería, 30 aeroplanos así como barcos de las flotas del Caspio y mar Negro. Esto elevó los temores sobre la estabilidad de la región del Cáucaso meridional y hasta sobre una posible agresión rusa contra Georgia. Estos temores se vieron reforzados por la mayor beligerancia en los pronunciamientos de políticos rusos y por el creciente número de incidentes cerca del frente de la guerra de 2008 (la explosión del empalme ferroviario en Zugdidi el 11 de junio, el ataque a observadores del EUMM cerca del límite georgiano con Abkhazia el 21 de junio, y repetidos intercambios de fuego en Ossetia del Sur).

Los recientes eventos probablemente no sean antesalas de una guerra ni una invasión rusa a Georgia. Los beneficios potenciales para Rusia de una invasión a esa república (establecer el conflicto entre Georgia y las repúblicas separatistas para cumplir los deseos de Rusia de establecer un protectorado en Georgia) podrían ser superados por los costos (un retroceso en la política de "nueva apertura" con EEUU, reacciones negativas en el nivel internacional, problemas para mantener el orden sobre el territorio georgiano). Existen también importantes diferencias entre la actual situación y la de agosto 2008. En particular, provocar a Georgia parece menos probable. Hasta es debatible si Rusia está interesada en solucionar el conflicto del Cáucaso meridional por la fuerza.

En esta situación, parece que, a pesar de la retórica agresiva de Moscú, Rusia no está promoviendo una guerra sino, simplemente, implementando una amplia estrategia geopolítica. Ante la comunidad internacional está mostrando su determinación de defender la independencia de las repúblicas separatistas y la protección de la población rusa en el exterior de la Federación (que fueron los más probables propósitos de la visita del presidente Medvedev a Ossetia del Sur el 13 de julio de 2009). No se puede descartar que el objetivo de este paso haya sido mostrar a otros países que la pérdida para Georgia de Abkhazia y Ossetia del Sur es definitiva y que las discusiones sobre el asunto están concluidas.

Georgia no reconoció la independencia de las repúblicas separatistas y no parece que vaya a hacerlo en un futuro próximo. Por el contrario, las autoridades en Tbilisi están aferradas al principio de integridad territorial y a la necesidad de reintegrar a las dos provincias rebeldes. Georgia está dispuesta a firmar un acuerdo de no agresión, pero solo con Rusia. Debe destacarse que la mayoría de la oposición georgiana, a pesar de las frecuentes protestas desde abril de 2009, sostiene al presidente Saakashvili en la cuestión de Abkhazia y Ossetia del Sur, por lo cual un cambio en el gobierno no alteraría la política georgiana.

La postura de Georgia estuvo reforzada adicionalmente por el accionar de la diplomacia estadounidense. El 22 de junio 2009 tuvo lugar en Washington la primera reunión de la Comisión sobre Partenariato Estratégico EEUU-Georgia. El accionar de la Comisión está basado en las provisiones de la Carta sobre Partenariato Estatégico firmada por EEUU y Georgia a principios de enero 2009 y es indicio de la continuación de Obama de la política de George W. Bush respecto de los países del área post-soviética. Esta visión es fortalecida por la mencionada visita del presidente Obama a Moscú entre el 6 y 8 de julio de 2009, durante la cual destacó en numerosas ocasiones la integridad territorial de Georgia. En ese contexto también fue significativa la visita del vicepresidente Joe Biden a Georgia entre el 22 y 24 de julio de 2009.

Aunque una invasión rusa a Georgia en 2009 no parece probable, hay muchas posibilidades de violaciones recurrentes al alto el fuego entre ambas partes es conflicto. En este contexto, el período que se inicia a fines de agosto 2009 será particularmente peligroso por el aniversario de los eventos iniciados el 8 de agosto de 2008 y que redujeron su virulencia recién el 26 de ese mes. Son altamente probables incidentes y provocaciones en el frente de la guerra 2008 y retóricas agresivas. No se espera una solución diplomática del conflicto ni a corto ni mediano término. Es dudoso que Georgia reconozca de hecho -ni mucho menos de derecho- la subjetividad de Abkhazia y Ossetia del Sur que, con soporte ruso, se consideran a si mismas miembros plenos de la comunidad internacional.

Las posiciones opuestas de Georgia y de las repúblicas separatistas descartan cualquier posibilidad de entendimiento. Tanto en Rusia como Georgia, prevalece la hostilidad contra el otro Estado y, por esta razón, un cambio de gobierno en cualquiera de los dos Estados no acercará un entendimiento. En consecuencia, parece que el conflicto retornará a un estado de alto el fuego alternado con períodos de tensión y provocaciones.

 

Actividad internacional de Rusia en respuesta a la crisis financiera global

 

En junio 2009, Rusia impulsó una embestida mayor en el foro internacional. Representantes del mercado global tuvieron oportunidad de intercambiar puntos de vista durante el Foro Económico Internacional llevado a cabo en San Petersburgo (4-6 de junio), considerado el Davos ruso. Rusia ha intentado utilizar la crisis financiera global para mejorar su posición internacional. La construcción de una coalición internacional de Estados en desarrollo, que Rusia desea dirigir, es un medio para ese objetivo. Entre otras cuestiones, las autoridades rusas han animado a nuevos poderes regionales a que incrementen su participación en instituciones financieras internacionales, a expensas de EEUU y otros Estados occidentales.

Tanto la cumbre de la Organización del Tratado de Seguridad Colectiva (OTSC) como el encuentro del Consejo Interestatal de la Comunidad Económica Euro-Asiática (CEEA), fueron iniciativas importantes -desde la perspectiva rusa- para reintegrar el área post-soviética. Luego, los líderes de China, Rusia, India, Brasil, Pakistán, Afganistán y los Estados de Asia Central se reunieron en Yekaterinburgo (16-17 de junio) en las cumbres de la Organización de Cooperación de Shanghai (OCS) y Brasil-Rusia-India-China (BRIC).

La mayoría de estas cumbres fueron dirigidas por el presidente ruso Dmitri Medvedev, cuyo discurso se focalizó en la crisis financiera internacional y en la necesidad de dar respuesta al sistema financiero internacional. Como otro tema superlativo, en la cumbre de San Petersburgo la ministro rusa de Desarrollo Económico Elvira Nabiullina y la comisionada de comercio de la UE Catherine Ashton, informaron que para fines 2009 Rusia podría haber completado las negociaciones para entrar como miembro de la OMC. Pocos días después el primer ministro Vladimir Putin anunció que Rusia se retiraría de esas conversaciones para formar una unión comercial con Belarús y Kazakhstán y comenzar negociaciones conjuntas en el marco de la CEEA

La secuencia de estas cumbres organizadas por Rusia parecen tener un objetivo. La Parte rusa intentó primero probar las perspectivas de una cooperación económica con Estados de Occidente, como lo demuestran los esfuerzos realizados para lograr una incorporación más expeditiva en la OMC. Luego la declaración de Vladimir Putin -en vísperas de las cumbres de líderes de la OCS y BRIC-, señalan la no disposición rusa de trabajar con la UE y EEUU para superar la crisis financiera global. Esta es la primera oportunidad desde la formación de un grupo de Estados anti-EEUU -como respuesta a la guerra en Iraq- en que Rusia intenta formar una coalición contra los intereses de EEUU. Esta vez el eje es la esfera financiera y los Estados asiáticos y sudamericanos con mayores economías parecen ser los posibles aliados. Los objetivos de la coalición serían limitar la influencia del dólar estadounidense en el comercio internacional y en las reservas de divisas de estos Estados individuales, al tiempo que fortalecer la posición de los Estados en desarrollo en las instituciones financieras internacionales, en particular en el FMI y el BM.

Rusia considera que el primer objetivo puede ser alcanzado incrementando la participación en los Derechos Cambiarios Especiales (DCE), una unidad internacional de medida de las reservas de divisas. Incluso antes de las cumbres de la OCS y BRIC Rusia develó su plan de diversificar sus propias divisas y convertir sus 10 billones de reservas en dólares a DCE, como ya Brasil (10 billones) y China (50 billones) lo habían hecho.

Rusia también urgió a que se modificara la fórmula de valuación de los DCE, pero eso solo se podrá lograr para fines de 2010. Al momento, el valor del DCE es la resultante del valor del dólar estadounidense (44%), el euro (34%), el yen japonés (11%) y la libra esterlina (11%). Rusia intenta colocar en esa canasta otras monedas. Más aún, el presidente Medvedev propuso una nueva moneda para ser usada en el intercambio entre Estados de la OCS -posiblemente similar al ECU, predecesor del euro-.

Rusia está trabajando en una propuesta de cambios en el sistema FMI/BM que posiblemente sea publicitada en la cumbre de Estambul (6-8 de octubre). La propuesta abarcaría una nueva distribución de votos en el Panel de Gobernantes que, presumiblemente reducirá el poder de voto de EEUU (actualmente 16,77%) y algunos Estados de Occidente como Países Bajos (2,34%) y Bélgica (2,09) al tiempo que propondrá mayor cantidad de votos a China (actualmente 3,66%), Rusia (2,69%), India (1,89%), México (1,43%) y Brasil (1,38%).

De todos modos,  los rusos están al tanto de sus propias debilidades económicas estatales. A diferencia de China, que incrementará su PBI 6,5 en 2009, el ruso se reducirá por lo menos en un 7,5%. Las reservas financieras rusas acumuladas cuando las exportaciones de fuentes de energía generaban altos ingresos se han reducido. Aún así, las autoridades rusas han buscado sacar ventaja de la crisis financiera para fortalecer la posición rusa -al menos en el área ex soviética-. Para ello promovieron el establecimiento de un fondo anticrisis para la CEEA (10 billones de dólares de EEUU) en el que contribuyen con 7,5 billones. El número de Estados post-soviéticos negociando términos con la Federación de Rusia se ha ido incrementando, si bien Rusia necesita el soporte financiero de China, que tiene reservas de aproximadamente 20 billones de dólares.

La moneda china, el renminbi (RMB), se está convirtiendo en una importante divisa en las relaciones económicas y financieras internacionales. Por ejemplo, el Banco de China Popular ha firmado acuerdos bilaterales de divisas con los bancos centrales de Argentina, Indonesia, Corea del Sur, Malasia, Hong Kong y Belarús. Puesto que estos importadores de productos chinos aprecian más el RMB que los dólares, Rusia ha animado a China a que liberalice su economía y hacer convertible el RMB. De acuerdo con el ministro de finanzas Alexei Kudrin este es el camino más corto para hacer del RMB una divisa de reservas globales en diez años.

Al mismo tiempo, Rusia está preocupada ante el excesivo crecimiento de la posición de China y la posibilidad de quedar postergada. Para evitarlo ha intentado impulsar a otros poderes regionales a conformar una coalición. Esto la obliga a tener en cuenta los intereses de muchos Estados necesarios (por ejemplo, el éxito del nuevo concepto ruso del FMI/BM requiere 85% de los votos de los Estados-miembro), algo que no es parte de la tradición rusa en política exterior. Luego de la desintegración soviética, Rusia ha preferido las relaciones bilaterales, en las que siempre ha sido el socio más poderoso. Es más, luego de la cumbre BRIC, las autoridades rusas han declarado sostener a India y Brasil en su búsqueda de importantes asientos en la ONU y han resistido el ingreso de China al G-8, lo que hace dudar de la sinceridad de sus declaraciones.

En fin, Rusia ha logrado un indudable éxito al haber convocado a la primera cumbre del BRIC y en elevar la imagen de la OCS en la región (la presencia de no miembros en la última cumbre dc la OCS como Irán, India, Pakistán, Afganistán, Sri Lanka y Mongolia son evidencias en tal sentido). De todos modos la formación de una coalición de países en desarrollo contra los intereses financieros de EEUU será difícil de lograr. En primer lugar debido a la debilidad de los potenciales económicos de los miembros de la coalición. Más aún: no todos los Estados están tan ansiosos por reducir la influencia de EEUU como Rusia, debido a que están ligados a la economía estadounidense en diferentes medidas y a que podrían preferir al dólar como principal divisa de acuerdos internacionales y de reservas nacionales. En la cumbre de octubre del FMI/BM, posiblemente algunos países en desarrollo obtengan más votos en el Panel de Gobernantes. Rusia buscará beneficios desde su actividad diplomática de junio.

Las Cumbres

 

El 14 de junio de 2009 se llevó a cabo la Cumbre de la Organización del Tratado de Seguridad Colectiva de la CEI. La guerra civil permitió en 1996 el acceso de los taliban al gobierno de Afganistán. Moscú consideraba a este gobierno una fuente de "inestabilidad" y "terrorismo" en Asia Central, así como "una amenaza a los intereses de Rusia, Uzbekistán y otros Estados de la CEI."[1] La necesidad de protección dio lugar a la creación del Tratado de Seguridad Colectiva de la CEI, que en 2003 se transformó en la Organización del Tratado de Seguridad Colectiva de la CEI (OTSC), formada por Armenia, Belarús, Kazakhstán, Kyrgyzstán, Rusia, Tadjkistán y Uzbekistán, y que contaba con una -por el momento modesta- Fuerza Colectiva de Desplazamiento Rápido. El 14 de junio de 2009 la OTSC celebró su cumbre anual en Moscú, con ausencia de Belarús. En su transcurso los asistentes firmaron numerosos documentos, algunos de ellos con reservas por parte de Uzbekistán. Lo destacado es el impulso dado a la Fuerza Colectiva de Desplazamiento Rápido, que cambiará su composición, tamaño y estructura además de incorporar nuevas funciones, entre ellas las relativas al control de migraciones. Ya no se puede calificar a esta fuerza como modesta.

El 16 y 17 de junio de 2009 se llevó a cabo la Cumbre de la Organización de Cooperación de Shangai en Yekaterinburgo, Rusia. En abril de 1996, Rusia, China, Kazakhstán, Kyrgyzstán y Tadjkistán formaron el Grupo de los Cinco de Shanghai, con secretariado en Beijín. Un año después firmaron en Moscú el "Acuerdo sobre reducción mutua de fuerzas armadas en las fronteras", estableciendo, por primera vez en Asia, una estructura de seguridad multilateral regional[2]. Si bien la Organización de Cooperación de Shanghai no es un sistema de alianzas sino un partenariato -cooperación, intercambio, paz y seguridad- sus objetivos evidentes son contrarrestar los intereses de EE.UU. en las RCA y Cáucaso y contener el avance del Partenariato para la Paz de la OTAN y de la OTAN misma.

En la 3° Cumbre, celebrada en Alma Ata en julio de 1998[3], los Ministros de los cinco Estados hicieron explícita su interpretación del fenómeno al afirmar que están "resueltos a transformar las relaciones de buena vecindad, de amistad y cooperación entre los cinco Estados en factores importantes y duraderos de estabilidad, de seguridad y de desarrollo en el espacio eurasiático". Estos principios fueron confirmados en la siguiente Cumbre de Jefes de Estado del Grupo de Shanghai, realizada en Bishkek el 25 y 26 de agosto de 1999[4].

La 5° cumbre -realizada en julio de 2000 en Dushanbe- destacó la necesidad de alcanzar mayor cooperación para combatir las mayores amenazas para la seguridad de sus integrantes: extremismo religioso, separatismo, terrorismo internacional y tráfico de drogas. Los líderes de las RCA hicieron responsable al régimen talibán de Afganistán -que comparte un límite de 2000 Km. con Tadjikistán, Turkmenistán y Uzbekistán- de muchas de esas amenazas.

También fue sugestiva la incorporación de Uzbekistán -como sexto integrante- en la 6° cumbre anual celebrada en julio de 2001. Los seis Estados ocupan el 61% del territorio eurasiático y cuentan con la cuarta parte de la población mundial. Ese año Pakistán también había solicitado a Beijing su incorporación a este Grupo. "Ese movimiento fue interpretado como una señal de que Islamabad estaba intentando alejarse de EEUU y otros Estados Occidentales".[5] El Grupo de Shanghai adoptó desde esta cumbre los nombres "Organización de Cooperación de Shanghai" (OCS) y "Convención de Shanghai para la Supresión del Terrorismo, Separatismo y Extremismo (religioso)". Además en ella se decidió la creación de un grupo antiterrorista con base en el territorio de Kirgyzstán.

Desde la Cumbre de 2005, los miembros de la OCS vienen solicitando la reducción de la presencia militar de EEUU en Asia Central y un cronograma de retiro de Afganistán. En 2006 adquirieron calidad de observadores en ella Mongolia, India, Pakistán e Irán.

A la cumbre de junio de 2009, realizada en la ciudad rusa Yekaterinburg, asistieron los presidentes de los seis Estados-miembros, y presidentes o altos representantes de India, Irán, Mongolia, Pakistán, Afganistán, el subsecretario de asuntos exteriores de la ONU y altos funcionarios de la CEI, de la Comunidad Económica Eurasiática -CEE- y de la OTSC. Los temas en debate fueron la construcción de un sistema interestatal más justo y racional en que se reflejen estructuras que se ocupen de la seguridad y estabilidad financiera. Los jefes de Estado firmaron una convención contra el terrorismo y al respecto elevaron el nivel de cooperación entre los miembros de la OCS, aprobando regulaciones en medidas diplomátco-políticas y mecanismos de respuesta a eventos que comprometan la paz, seguridad y estabilidad regional. Tambien acordaron cooperar en asegurar información internacional sobre seguridad y el entrenamiento de funcionarios de las agencias de contra-terrorismo de los Estados de la OCS. Al respecto destacaron las tareas de la Conferencia Especial sobre Afganistán, realizada bajo los auspicios de la OCS en Moscú el 27 de marzo de 2009, enfocadas en acciones comunes contra el terrorismo, tráfico ilegal de estupefacientes y crimen organizado. Como consecuencia de ella se realizaron los ejercicios conjuntos Norak-Anti-Terror-2009 en Tadjikistán a mediados de abril 2009, reconociendo los beneficios de continuar con la práctica coordinada de los mismos como parte de los objetivos del cuerpo antiterrorista de la OCS. Se estableció que se dará prioridad a la cooperación con las agencias anti-narcóticos de los Estados miembro además de su interacción en asistencia en emergencias, decisión aprobada en el 4° encuentro de jefes de departamentos de la OCS, realizado en Aktau -Kazakhstán- el 5 de junio de 2009. Se destacó la participación de los miembros observadores en actividades enmarcadas en la OCS y se garantizó el ingreso como "países asociados al diálogo" a Belarús y Sri Lanka. El Grupo Especial de Expertos se comprometió a trabajar en borradores a los efectos de admitir nuevos miembros a la Organización. Se estableció que la sede de la Cumbre 2010 será Uzbekistán..

Con posterioridad a la Cumbre 2009, la Organización de Cooperación de Shanghai ha estrechado sus relaciones con Afganistán, en su condición de grupo de contacto. En consonancia, la Organización, devenida nuevo modelo de integración regional en Asia, ha estado enfocada hacia el fortalecimiento de la seguridad regional y global. Afganistán incrementó su importancia ante la OCS, por su relevancia geoestratégica y por ser un territorio vulnerable en la seguridad de los países miembros. Rusia y China consideran que, pese a los esfuerzos de las autoridades afganas y a la presencia militar internacional, la amenaza del terrorismo islámico aún es muy latente en la zona, a lo que se agrega el tráfico de estupefacientes.[6]

El 16 de junio de 2009, también en Yekaterinburg (Rusia), se llevó a cabo la 1° Cumbre Brasil-Rusia-India-China (BRIC). Contó con la presencia del presidente de Brasil, Luiz Inacio Lula da Silva, el presidente de Rusia, Dmitri Medvedev, el primer ministro de India, Manmohan Singh, y el presidente de China, Hu Jintao. Durante su transcurso de discutieron vías posibles para paliar los efectos de la crisis financiera y económica global. En la agenda figuró la reorganización de las instituciones financieras internacionales, la redacción de una declaración conjunta y recomendaciones para superar la crisis mundial. Brasil, Rusia, India y China consideraron que la solución a la crisis alimentaria debía ser de carácter integral e incluir medidas a corto y largo plazo ejecutadas en el marco de una estrecha coordinación internacional, según se desprende de la declaración conjunta aprobada en esta Cumbre. Los mencionados líderes advirtieron que las oscilaciones de precios de los alimentos en el mundo -agravadas por la crisis financiera- amenazaban a la seguridad alimentaria global. En consecuencia, en la declaración final, los dignatarios destacaron que la arquitectura financiera y económica debía ser reformada de acuerdo a :

  • Decisiones democráticas, transparentes y un proceso de implementación por los organismos financieros internacionales,
  • Sólidas bases legales
  • Compatibilidad de actividades de instituciones regulatorias nacionales internacionales eficientes,
  • Fortalecidas prácticas de supervisión en manejo de riesgos.

Solicitaron a la comunidad internacional -entre otras cuestiones- mantener el sistema de comercio multilateral estable, limitar el proteccionismo y tener en cuenta los resultados abarcativos y balanceados de la Agenda de Desarrollo de Doha. También, a sabiendas que los países pobres resultan los más golpeados por la crisis financiera, tener en cuenta los Objetivos de Desarrollo del Milenio que establecen un fondo del 0,7% del PBI de los países desarrollados para asistirlos, así como los resultados de la Declaración de Río para el siglo XXI. La Cumbre 2010 se realizará en Brasil.

Por último, como en años anteriores, la cuestión de los hidrocarburos rusos y las rutas de abastecimiento a Europa Occidental se mantuvo en la agenda de la Federación. Se debe destacar que durante más de 30 años, Rusia ha sido el más seguro y constante abastecedor de hidrocarburos de Europa Occidental. Las preocupaciones de este mercado se relacionan con evitar la dependencia de un solo proveedor y la carta jugada por Ucrania que en varios inviernos, -hecho reconocido por los gobiernos correspondientes de Kiev-, sustrajo más combustible del acordado de los ductos de transporte por su territorio, Rumania y Bulgaria, dejando en escasez  al resto de los clientes europeos. El contrato de transporte por esta ruta expirará en 2011 y Rusia ha diversificado sus posibles vías de abastecimiento a Europa. Ellas han incorporado a Belarús o ductos bajo el mar Báltico, para llegar a proveer de combustible a Estados escandinavos, Alemania y hasta proyectos a las islas británicas. Otras rutas tienen que ver con Turquía, si bien se mantiene la cuestión de paso de buques petroleros por los estrechos de Bósforo-Dardanelos, que es una continua fuente de reuniones y de cruces de notas entre ambos gobiernos. De todos modos también son importantes los acuerdos entre estos Estados. Desde hace 3 años el gasoducto más profundo del planeta, Blue Stream -en el mar Negro-, une a Rusia con el puerto turco Samsun. La visita del presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, a Moscú en mayo 2009 tuvo en la agenda cuestiones energéticas. Se planea una segunda ruta submarina -Blue Stream 2-, paralela a la anterior, que podría incorporar a Israel como cliente. Pero en este caso, el hecho de su continuación a través de Anatolia a Ceyhan en el Mediterráneo oriental haría más poderosos los argumentos turcos para no permitir el paso de petroleros por los estrechos. Otro acuerdo largamente postergado es el Nabucco -gas del Caspio por Turquía, Bulgaria, Rumania y Hungría hasta Austria- que cuenta con la anuencia de los gobiernos europeos involucrados, Azerbaiján, Turquía y Georgia pero es rechazado por Uzbekistán, Kazakhstán y Turkmenistán. En consecuencia, hasta el momento Nabucco cuenta con 20% del gas requerido para que su construcción sea financieramente viable. Además permanece la cuestión de si Turquía será socio en el proyecto o solamente territorio de paso del ducto. Tanto Blue Stream 2 como Nabucco son considerados -a lo sumo- proyectos a mediano plazo.

Pero a estas negociaciones ruso-turcas se incorporan más elementos: existen proyectos de energía nuclear. En 2008 Turquía licitó la construcción de su primera central energética nuclear. Solamente se presentó un consorcio formado por estos dos Estados. Rusia presiona para el inicio de esta construcción y parece probable que Ankara lo aceptará si Rusia permite la construcción del oleoducto Samsum-Ceyhan.

Hasta aquí los hechos salientes en el período enunciado al comienzo de este trabajo. Sin embargo se debe recordar que son algunos hechos puntuales ante la magnitud de la Federación y de sus relaciones de orden diverso con el resto del mundo.

 


[1] "Governments Initiate Joint Anti-insurgency Measures".  En Jamestown Monitor. Agosto 31 de 2000

[2] Para más detalles sobre este tópico, véase Stanganelli, Isabel. "China y Rusia: dos colosos en busca de nuevos equilibrios". En Diplomacia, Academia Diplomática de Chile. N° 81. Oct-nov. 1999. Pp. 27-34.

[3] Cooperación-Seguridad-China, Kazakhstán, Kirguizstán, Rusia, Tadjikistán. En Documents d´Actualité Internationale. Nº 20. Octubre 15 de 1999. Pp. 829.

[4] "Cooperation - Groupe de Shanghai - Kirghizstan". Bishkek, 25-36 de Agosto de 1999. En Documents d´Actualité Internationale. Nº 20. Octubre 15 de 1999. Pp. 829.

[5] Damon Bristow. Pakistan´s bid to join the Shanghai Five: activism or insecurity? En Central Asia Caucasus Analyst. 11 de abril de 2001. www.casianalyst.org

[6] González Marrero, C.: "Afganistán en la agenda de la Organización de Cooperación de Shanghai" en Observatorio de la Economía y la Sociedad de China Nº 11, junio 2009. Accesible a texto completo en http://www.eumed.net/rev/china/

Lo último
0
Para participar en la conversación,
inicie sesión o regístrese.
loader
Chats
Заголовок открываемого материала