Pretoria, 8 de julio, PL para RIA Novosti. Por Frank Marín Vergara. España dejó a una de las figuras emblemáticas del fútbol internacional, el alemán Franz Beckenbauer, sin el anhelo de disfrutar a su selección en la final del Campeonato Mundial Suráfrica-2010.
El legendario ex jugador reveló hace tres días su deseo y pronóstico de que su nación y Holanda disputarían el próximo domingo el título del certamen, en el majestuoso estadio Soccer City de Johannesburgo.
Previa disculpa a españoles y uruguayos por su elección, el Kaiser señaló que un duelo Alemania-Holanda constituiría la mejor de las finales posibles para la primera edición de la competencia en suelo africano.
Además de patriotismo y lógica por el desempeño germano en el campeonato, seguramente en su interior existía la ilusión de revivir desde las gradas la final de 1974, cuando alzó la copa como capitán en su país, al vencer 2-1 a la entonces Naranja Mecánica.
Sin embargo, Beckenbauer sólo acertó en el 50 por ciento de sus cálculos y para su pesar, atinó en la mitad que menos le interesaba, pues el once ibérico ganó 1-0 y envió a los teutones a discutir el bronce, mientras la Oranje venció 3-2 a la Celeste.
Estadios que acogerán el Mundial de fútbol Sudáfrica. Infografía 
Ninguna de las virtudes de la Mannschaft reverenciadas por Beckenbauer el lunes último afloraron en la cancha del estadio Moses Mabhida de Durban, y en contraste se vio la peor imagen del conjunto de Joachim Low, quien, además de buen DT, parece ser un caballero.
(Los españoles) son tan buenos técnicamente que hoy (por ayer) nos han llevado hasta el límite de nuestras posibilidades. En ningún momento pudimos liberarnos de nuestras inhibiciones. Te hacen correr de tal forma el balón que nos hemos pasado buena parte del partido corriendo tras él, admitió sin adornos Low.
Varios de sus jugadores también reconocieron la superioridad del rival y lamentaron haber desarrollado su peor partido de la justa en las semifinales, después de generar tanta expectativa.
Como le sucedió cuatro años atrás en su patio, el cuadro alemán mostró el mejor juego de la lid, pero falló en el momento inoportuno y deberá conformarse con disputar el tercer lugar otra vez.
Entretanto, España celebra su actuación histórica y espera con ansias el pitido inicial de la final, de la cual emergerá un campeón inédito.
Los discípulos de Vicente del Bosque seguramente desean conocer más vaticinios procedentes de Alemania, pues los de Beckenbauer y el singular pulpo Paul le han traído fortuna.
Premios para futbolistas de la Copa Mundial de Sudáfrica 2010. Infografía
