Eslovaquia envía a Hungría a más de 250 socorristas que participarán en la liquidación de las consecuencias de la avería en una fábrica de alumnio, el escape tóxico de la cual ya alcanzó el Danubio, informó hoy a la prensa un portavoz del Servicio de Socorrismo de Eslovaquia.
“Los socorristas eslovacos irán a la parte occidental de Hungría, a la zona de la catástrofe, para ayudar a liquidar sus consecuencias. Además de 250 socorristas, 25 expertos eslovacos se ocuparán de desinfectar los territorios contaminados. Hemos participado en operaciones de socorrismo por todo el planeta , pero el desastre occurido en Hungría es algo excepcional”, dijo el portavoz.
La avería se produjo el lunes pasado en la empresa Ajkai Timfoldgyar Zrt que forma parte de la compañía MAL Zrt y se ubica a unos 160 kilómetros al oeste de Budapest. Explosión destruyó el dique de un reservorio con desechos tóxicos, del que se vertieron unos 1,1 millones de metros cúbicos de “barro rojo”.
Ya ascendieron a siete las víctimas mortales del desastre. Un habitante de Kolontar, poblado en la zona afectada, desapareció. Unas 120 personas recibieron traumas y quemaduras, el estado de 40 de ellas es grave. Centenares de personas fueron evacuadas.
El jueves pasado, el “fango rojo” alcanzó el río Mosoni-Duna, brazo derecho del Danubio, ubicado cerca de la frontera entre Austria y Eslovaquia, y también estuvo por entrar en el río Raba que desemboca en el Danubio.
