La campeona del mundo de gimnasia artística, la rusa Alia Mustáfina, cuya actuación fue clave para la victoria de Rusia en el Mundial 2010 en Rotterdam, confesó que gracias a la medalla de oro se convirtió en una auténtica celebridad entre sus compañeros.
“Cuando regresé a mi escuela después del Mundial, mis compañeros de clase me recibieron con mucho cariño, con flores y dulces, me sentía como una héroe. Todo fue muy agradable”, contó la campeona a RIA Novosti.
La joven deportista va a un colegio en Moscú, le encantan el álgebra y la física, mientras que la literatura y el ruso le resultan difíciles.
“Es que no estoy acostumbrada a leer. Casi no tengo tiempo libre. Y cuando lo tengo, lo paso en Internet o en redes sociales. También charlo con padres y amigos por Skype”, explicó la gimnasta.
La selección femenina de Rusia se proclamó campeona del mundo por equipos en el Campeonato del mundo de gimnasia artística 2010, una victoria que no se había repetido desde 1991, cuando el equipo de la antigua Unión Soviética se adjudicó el oro del certamen, en Indianapolis, EEUU.
El equipo ruso, que ya entró a la historia, estuvo formado por Alia Mustáfina, Ksenia Afanásieva, Tatiana Nabíeva, Ksenia Seménova, Ekaterina Kurbátova y Anna Deméntieva.
