El primer ministro ruso, Vladímir Putin, reconoció hoy que las estructuras criminales ejercen influencia en algunos organismos del poder municipales en Rusia.
Putin, quien protagonizó una sesión online de preguntas y respuestas con los ciudadanos, admitió que “la sociedad está más o menos protegida de la penetración de criminales” en la cúpula regional “ahora que las candidaturas de gobernadores son propuestas por el presidente y aprobadas o rechazadas luego por diputados locales”. “En las municipalidades, cuyos jefes son elegidos por sufragio directo, persiste la influencia criminal, lamentablemente”, agregó.
Destacó que es necesario vigilar esos procesos tanto a escala nacional como en las regiones, así como potenciar el engranaje de los cuerpos de seguridad y justicia, pero dejó claro que no es partidario de suprimir las elecciones municipales.
Mencionó aparte el sonado caso de Kuschevskaya, una aldea de la región de Krasnodar donde el brutal asesinato de 12 personas, en noviembre pasado, desveló la existencia de un amplio grupo mafioso que mantenía amedrentados a los vecinos locales. “Es una señal muy seria para que la sociedad se espabile”, dijo.
