Las fuerzas de seguridad sirias abrieron fuego hoy contra unos aldeanos que llegaron a la ciudad sitiada de Deraa, en el sur del país. Al menos siete personas perecieron y decenas recibieron heridas, comunicaron medios noticiosos.
Miles de campesinos se dirigieron a Deraa para expresar apoyo a sus habitantes, informó la agencia Reuters, aduciendo las siguientes palabras de un testigo presencial: “Los agentes dispararon contra la gente a la entrada occidental de la ciudad, a unos tres kilómetros del centro”.
Otro testigo añadió que los participantes de la protesta evacuan en sus autos a los heridos, que son varias decenas.
La prensa oficial de Siria a su vez comunicó que un “grupo de terroristas armados” atacó este viernes el retén de Deraa, asesinando a cuatro militares y secuestrando a dos.
Las conmociones masivas se desarrollan desde hace dos meses en Siria. Comenzaron a mediados de marzo en la ciudad de Deraa, situada en la frontera con Jordania, donde fue arrestado un grupo de escolares que escribían consignas antigubernamentales en las paredes. La gente se lanzó a las calles en Deraa, exigiendo liberarlos. Poco después, los desórdenes se extendieron a otras regiones del país.
Según datos de la oposición, los choques entre los manifestantes y los agentes del orden provocaron al menos 450 muertos en Siria. La agencia noticiosa nacional SANA comunicó la víspera que en los choques perecieron 78 soldados y policías.
Las protestas en el país continúan a pesar de que el Gobierno anunció un amplio programa de reformas. En particular, el presidente de Siria, Bashar al-Asad, firmó un decreto sobre la derogación de la Ley del Estado de Emergencia, vigente desde 1963, que fue una de las principales exigencias de la oposición.
