Francia niega estar negociando con representantes de Gadafi

Francia confirma haber recibido unos mensajes de los representantes del líder libio Muamar Gadafi, pero de momento no se sostienen ningunas “negociaciones directas”, comunicó hoy el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores francés Bernard Valero, citado por la agencia France Presse.

“Francia se pronuncia a favor de buscar una solución política (de la crisis libia), lo que ha declarado en más de una ocasión. Entre Francia y el régimen de Gadafi no se sostienen negociaciones directas. Pero les transmitimos mensajes vía el Consejo Nacional de Transición  y a través de nuestros aliados”, dijo el portavoz.

Anteriormente, unos medios informaron que el hijo del líder libio, Saíf al Islam, entrevistado por el diario argelino El Khabar, afirmó que las autoridades de su país sostienen negociaciones con París, pero no con los insurrectos.

La semana pasada, el diario ruso Kommersant reveló que Muamar Gadafi estaría dispuesto a abandonar el poder a cambio de garantías de seguridad que pueden ofrecerle algunos países de la OTAN, en particular, Francia.

Según una fuente del rotativo en el Gobierno ruso, Francia podría desbloquear parte de las cuentas bancarias de Gadafi y sus familiares, y también contribuir a que “el coronel, en caso de que se vaya pacíficamente, no sea procesado por el Tribunal de la Haya”, que anteriormente emitió una orden de arresto contra él. Se estudia además la posibilidad de que el líder libio se quede en su país, según la misma fuente.

Pero más tarde la agencia Reuters refutó esa noticia, al alegar una declaración del secretario de prensa del Gabinete de Ministros libio, Musa Ibrahim, quien calificó de errónea tal información y dijo que la destitución de Gadafi no se cuestiona. “El futuro de Libia lo deberán determinar los propios libios”, declaró.

El lunes de la semana pasada, el Gobierno de Libia informó que sus representantes se reúnen con emisarios de los insurrectos en Italia, Egipto y Noruega. Según Musa Ibrahim, en la reunión de Roma, a los rebeldes los representó el ex titular de Seguridad del régimen de Gadafi, Abdel Fattah Younis. El ex ministro se puso del lado de los insurrectos en febrero pasado y encabezó el movimiento de oposición.

Anteriormente, la hija de Gadafi, Aisha, había señalado que “se mantienen contactos directos e indirectos” con los rebeldes.
Según el portavoz del Gobierno libio, las partes trataron los temas de cese del fuego, ayuda humanitaria, comienzo del diálogo entre ambos bandos,  período de transición y transformaciones políticas.

A mediados de febrero en Libia estallaron protestas masivas contra el régimen de Muamar Gadafi que lleva más de 40 años en el poder. Las manifestaciones desembocaron en choques armados entre los rebeldes y las fuerzas gubernamentales.

El Consejo de Seguridad de la ONU aprobó el 17 de marzo una resolución sobre la imposición de una zona de exclusión aérea sobre Libia. Para poner en práctica esa medida, garantizar el embargo sobre los suministros de armas a Libia y proteger a su población civil, una coalición de países occidentales emprendió el 19 de marzo pasado una operación militar en Libia.

El 31 de marzo, su mando fue asumido por la OTAN. El mandato para llevarla a cabo expiraba el 27 de junio pasado. Pero el 1 de junio fue prorrogado por 90 días, hasta finales de septiembre.