El Defensor del Menor de Rusia, Pável Astájov, comparó prácticas de crianza de la estadounidense Jessica Bigley, madre adoptiva de un niño ruso con las torturas de prisioneros en Guantánamo, Cuba.
Este martes dio comienzo en EEUU un juicio contra la habitante de Alaska, Bigley, acusada de abuso infantil de uno de sus hijos adoptados en Rusia según testimonia una grabación.
En el vídeo mostrado en la televisión estadounidense en noviembre de 2010 y que más tarde apareció en Internet, se ve como la madre adoptiva le grita a su hijo ruso.
Bigley, madre de cuatro hijos propios y dos niños gemelos adoptados en Rusia, explicó que sólo trataba de inculcarle obediencia a su hijo de siete años.
Para el defensor ruso "esta situación debe ser considerada de trato cruel y no de educación rigurosa como lo presenta la madre adoptiva. Tales métodos son comparables en gravedad con las torturas aplicadas a prisioneros en Guantánamo”, dijo.
En enero de este año, durante la primera sesión del caso, la fiscalía declaró que los métodos utilizados por Bigley a su hijo adoptivo, son inaceptables.
La acusada no reconoció su culpa y su defensa alegó que las acciones de Bigley no pueden ser clasificadas de delito de acuerdo con las leyes locales de la Constitución de EEUU.
