Al menos 20 manifestantes murieron hoy en enfrentamientos con las fuerzas de seguridad en varias ciudades de Siria, según prensa internacional.
Este viernes, después de la oración tradicional, miles de sirios que salieron a las calles para protestar contra el régimen del presidente Bashar Asad, se enfrentaron a la policía que abrió fuego contra los manifestantes.
Organizaciones locales de derechos humanos dijeron que los enfrentamientos más graves ocurrieron en la provincia de Deraa, donde las fuerzas de seguridad abrieron fuego contra una multitud de manifestantes.
El activista Aba Abdallah Zaid, dijo que como resultado de los enfrentamientos en la provincia murieron 18 personas y varias decenas resultaron heridas.
Las fuerzas de seguridad sirias dispararon contra manifestantes que con altavoces exigían el derrocamiento del régimen de Asad, en la localidad de Deir ez-Zor. Para el momento, no se reportaron víctimas mortales ni heridos.
Anteriormente, el presidente sirio en una conversación telefónica con el secretario general de la ONU Ban Ki-moon, dijo que el ejército y la policía pusieron fin a todas las operaciones contra los manifestantes que exigen el cambio de régimen.
Las protestas antigubernamentales comenzaron en Siria a mediados de marzo pasado en el sur del país, luego se extendieron a otras regiones. Los defensores de derechos humanos afirman que hasta dos mil personas perdieron la vida en los choques con las fuerzas de seguridad.
Las autoridades sirias a su vez responsabilizan de los desórdenes a “elementos extremistas armados que gozan del apoyo de fuerzas exteriores” y declaran en los disturbios perecieron unos 500 militares y agentes de seguridad.
