Unidades de los rebeldes combaten en Trípoli al mando de un ex líder islamista

 Las unidades armadas de los insurrectos actúan en Trípoli al mando del ex emir del Grupo Islámico Combatiente Libio, Abdelhakim Belhadj, que fue detenido en una ocasión por las autoridades de Jamahiriya, comunicó hoy el rotativo argelino Al Habar.

El hijo del líder libio Saíf al Islam Gadafi liberó a Belhadj de la cárcel en marzo de 2010 en el marco de una amnistía anunciada para centenares de islamistas. El grupo de Belhadj estuvo vinculado con Al Qaeda, según las autoridades de Libia, pero más tarde renunció a la lucha armada, por lo que fue amnistiado.

Al ex emir le fue concedido el honor de liberar Trípoli de las fuerzas de Gadafi. Eso significa, según el rotativo Al Habar, que entre la oposición armada libia predomina el movimiento salafista (“salaf” significa primeras generaciones de musulmanes). Además, Belhadj comparece a menudo en espacios de la cadena de televisión Al Jazeera, que es otro testimonio de que podrá desempeñar un papel clave en la futura Libia.

El lunes pasado, los rebeldes se abrieron paso hacia Trípoli y lograron  ocuparlo. Actualmente, las fuerzas de la oposición controlan más del 90% de la área de la capital. Pero los combates contra las unidades fieles a Gadafi continúan en varios distritos de la ciudad. Por todas partes ocurre el merodeo.

El Consejo de Seguridad de la ONU aprobó el 17 de marzo una resolución sobre la imposición de una zona de exclusión aérea sobre Libia.
Para poner en práctica esa medida, garantizar el embargo sobre los suministros de armas a Libia y proteger a su población civil, países occidentales emprendieron el 19 de marzo pasado una operación militar en Libia.

El 31 de marzo, su mando fue asumido por la OTAN. El mandato para llevarla a cabo expiraba el 27 de junio. Pero el 1 de junio fue prorrogado por 90 días, hasta finales de septiembre.