Estamento político ruso niega que Medvédev haya propuesto reforma en respuesta a reciente protesta

Altos funcionarios rusos dudan de que la reforma política propuesta hoy por el presidente Dmitri Medvédev sea una reacción a las protestas a raíz de las recientes elecciones legislativas, en particular, la manifestación del 10 de diciembre en la plaza Bolótnaya de Moscú que reunió, según diversas estimaciones, entre 25 y 40 mil personas.

“Habrá quienes atribuyan la iniciativa a la presión de Bolótnaya pero algunas de esas propuestas se han debatido anteriormente”, señaló Serguei Narishkin, ex jefe de la Administración del Kremlin y, desde ayer, nuevo presidente de la Duma de Estado, o Cámara baja del Parlamento ruso.

Su homóloga del Senado, Valentina Matvienko, también resaltó que esas propuestas “se debatieron en reiteradas ocasiones” y que “el presidente llevaba tiempo gestándolas”.
El jefe del Estado propuso este jueves, en su mensaje anual al Parlamento de Rusia, impulsar una amplia reforma política, entre otras cosas, volver a la elección de gobernadores regionales por sufragio directo, simplificar el registro de partidos políticos, así como la promoción de pretendientes a la presidencia de Rusia, y reforzar la representación territorial en la asamblea legislativa.

El asesor económico de Medvédev, Arkadi Dvorkóvich, no piensa que los mítines influyan mucho en la toma de decisiones. “Más importantes son los ánimos sociales. Estamos hablando de decisiones que son relevantes y reflejan los intereses de millones de personas (…) Los mítines no son más que una señal en este sentido”, dijo.