El primer ministro albanés, Sali Berisha, anunció hoy que su país congela el proyecto de una central nuclear a raíz del accidente del pasado año en la planta japonesa de Fukushima.
“La energía atómica es la más limpia y la más barata pero lo ocurrido en Fukushima hace revistar este planteamiento”, manifestó Berisha de visita en Podgorica, la capital de Montenegro.
Albania planeaba construir una central nuclear de 1.500 megavatios en la región de Skadar, cerca de la frontera con Montenegro. El proyecto, evaluado en torno a 4.000 millones de euros, suscitaba recelos en esta nación vecina.
Berisha recordó que Skadar es una zona de “cambios tectónicos”, por lo que el proyecto de la central queda congelado “hasta que la ciencia se pronuncie sobre el dilema”.
Un devastador terremoto y tsunami que azotaron la costa nororiental de Japón el 11 de marzo de 2011 dejaron fuera de servicio los sistemas de refrigeración en la central Fukushima-1, lo que provocó explosiones en varios reactores y fugas radiactivas. Las autoridades evacuaron a la población en un radio de 20 kilómetros en torno a la planta. Poco después, se reportó la contaminación radiactiva del aire, el agua marina y potable y los alimentos.
