Los Gobiernos de Austria y Holanda boicotearán los encuentros de la Eurocopa 2012 en Ucrania, a menos que las autoridades ucranianas mejoren las condiciones de prisión de la ex primera ministra Yulia Timoshenko, advirtieron hoy los respectivos ministros de Asuntos Exteriores, Michael Spindelegger y Uri Rosenthal.
“Ningún miembro del Gobierno austriaco presenciará los partidos de la Eurocopa en Ucrania”, dijo Spindelegger, citado por el diario Kurier. Agregó que Viena desea mostrar así su “solidaridad” con Timoshenko.
Por su parte, Rosenthal manifestó a la prensa holandesa que “si no hay mejora visible (…) en particular, en el tratamiento de la ex primera ministra Yulia Timoshenko en prisión, el Gobierno se abstendrá de asistir a los juegos del campeonato europeo en Ucrania”.
También anunció la intención de plantear el ‘caso Timoshenko’ en el próximos encuentro de los cancilleres de la UE, el 14 de mayo.
Polonia y Ucrania son países coorganizadores de la Eurocopa 2012 que tendrá lugar del 8 de junio al 1 de julio. Austria quedó eliminada en septiembre de 2011, en la etapa de clasificación. La selección de Holanda recibió un pasaje a la Eurocopa y jugará en la fase de grupos contra Dinamarca, Alemania y Portugal. Todos estos partidos han de celebrarse en la ciudad ucraniana de Járkov.
Varios políticos europeos de primera fila, encabezados por la canciller federal de Alemania Angela Merkel, ya se declararon dispuestos a boicotear el campeonato, si no hay mejoras en la situación de Yulia Timoshenko.
Timoshenko fue primera ministra de Ucrania en enero-septiembre de 2005 y de diciembre de 2007 a marzo de 2010. Se postuló como candidata a la presidencia en las elecciones de 2010 pero perdió en las urnas ante Víctor Yanukóvich, actual jefe del Estado. En octubre de 2011, Timoshenko fue condenada a siete años de cárcel por incurrir en un abuso de poderes al firmar convenios de gas con Rusia en 2009.
Actualmente cumple la condena en una prisión de Járkov y está en huelga de hambre desde el 20 de abril protestando por supuestos maltratos por parte de médicos y otros empleados del centro penitenciario.
