Libia liberó hoy a cuatro miembros de la Corte Penal Internacional (CPI) detenidos el 7 de junio después de que el jefe de este organismo, con sede en La Haya, se disculpara por las dificultades que supuso la misión de sus colaboradores, según los medios internacionales.
“Los cuatro miembros (de la delegación de la CPI) están libres”, informó AFP al citar a Ajmi al-Atiri, jefe de una brigada militar que retiene en Zintan a Saif el Islam, hijo del asesinado líder libio Muamar Gadafi.
Representantes de la CPI, entre ellos, la australiana Melinda Taylor y el ruso Alexandr Jodakov, se desplazaron a esta localidad del noroeste de Libia para entrevistarse con el prisionero, a quien la Corte imputa crímenes contra la humanidad, y ayudarle a preparar la defensa.
Las autoridades de Libia detuvieron a los miembros de la delegación alegando que Taylor intentó pasarle a Saif el Islam documentos que supuestamente representaban un peligro para la seguridad nacional.
El pasado mes de junio, funcionarios libios se reunieron con representantes de la CPI y se comprometieron a tomar las medidas necesarias para la liberación de sus colegas. Lo hicieron después de que la CPI manifestó su “profundo lamento por cualquier suceso que haya podido suscitar la preocupación de las autoridades de Libia”.
El presidente de la CPI, Sang-Hyun Song, ya agradeció al Gobierno de Libia las gestiones necesarias para la liberación de sus que podrán reunificarse ahora con sus respectivas familias.
