Al menos 47 personas murieron por las inundaciones provocadas por fuertes y prolongadas lluvias en Níger, comunicaron hoy las autoridades locales citadas por medios internacionales.
Además, unas 370.000 personas sufrieron pérdidas materiales a causa de las riadas.
Según el ministro nigeriano del Interior, Abdou Labo, las autoridades necesitarán unos 9,7 millones de dólares para prestar ayuda a los damnificados.
El Gobierno ya asignó 5,6 millones de dólares para estos fines, pero los medios escasean. El país también está necesitado de cereales, indica el comunicado.
La temporada de lluvias en África Occidental comienza habitualmente en junio y termina a finales de septiembre.
