España es el segundo destino turístico en importancia para los rusos, después de Turquía, escribe en su edición de hoy el diario Kommersant.
Hasta 2011 se mantenía invariablemente en el segundo puesto Egipto, pero tras la “primavera árabe” y la prohibición de vender viajes a los balnearios egipcios impuesta en febrero-marzo del año pasado, los rusos pusieron sus miras en España.
En verano de 2011 la afluencia de turistas rusos a este país creció en el 44-83% en función del mes. Según los expertos de las agencias TUI y Coral Travel, el verano pasado España repitió como el segundo destino en popularidad con altas tasas de crecimiento: en mayo la afluencia de los turistas rusos se incrementó el 34% hasta 106.300 personas; en junio, el 31% hasta 155.500 personas y en julio, el 39% hasta 151.200 personas.
Al mismo tiempo, el descanso en España encareció en relación con el verano del año anterior. Según las agencias turísticas rusas, el precio del viaje estándar a la península ibérica subió un 25% hasta 44.000 rublos (1.360 dólares al cambio actual) por persona.