El presidente estadounidense Barack Obama continuará su política del “reinicio” de relaciones entre Washington y Moscú, si logra la reválida en noviembre próximo, y buscará nuevos acuerdos con el Kremlin en materia del desarme pero no desistirá de crear un escudo antimisiles en Europa ni callará otros temas que son objeto de discrepancias bilaterales, como Siria, según la Plataforma 2012 divulgada anoche en una convención del Partido Demócrata.
El documento recuerda que el futuro rival de Obama en las urnas, el candidato republicano Mitt Romney, identifica a Rusia como enemigo geopolítico número uno para EEUU. “Esta mentalidad de la Guerra Fría ignora la existencia de intereses muy reales que compartimos con Rusia para reducir arsenales nucleares, frenar su proliferación adicional hacia países como Irán y Corea del Norte, y prevenir que materiales nucleares caigan en manos de terroristas”, consta en el texto.
La política del “reinicio”, proclamada por la Administración de Obama, contribuyó a la cooperación en estos terrenos, y el acuerdo con Rusia sobre el tránsito de cargas militares a Afganistán ayudó al abastecimiento de las tropas de la OTAN en el país centroasiático.
“Apoyamos el establecimiento de una relación de comercio normal y permanente con Rusia porque ello beneficiará a la economía, las empresas y los trabajadores estadounidenses”, señala el texto de la Plataforma 2012 que califica de “paso importante” el reciente ingreso de Rusia en la Organización Mundial de Comercio (OMC).
Barack Obama seguirá cooperando con Rusia para lograr nuevos recortes de armas nucleares y vehículos correspondientes, incluidas las armas tácticas y las armas nucleares no desplegadas. También buscará la ratificación del tratado universal sobre la proscripción de ensayos nucleares y un nuevo acuerdo que ponga cese a la producción de materiales de fisión.
Al mismo tiempo, la Administración de Obama no pondrá a un lado sus diferencias con el Kremlin y seguirá criticando enérgicamente aquellas acciones que rechaza, en particular, el apoyo de Rusia al régimen de Bashar Asad en Siria.
Tampoco hará concesiones a Moscú en otro tema que sigue siendo objeto de fuertes discrepancias bilaterales, la creación del escudo antimisiles en Europa.
“Confiamos en que EEUU y Rusia pueden cooperar en materia de defensa antimisil pero también hemos dejado claro que seguiremos adelante con nuestro sistema, empezando con los pasos que hemos dado para emplazarlo en Polonia, Turquía y Rumanía”, señala la Plataforma 2012.
