La canciller federal de Alemania, Angela Merkel, y el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, pusieron de manifiesto hoy sus discrepancias sobre el plan israelí de construir 3.000 viviendas para colonos judíos en Jerusalén Este y Cisjordania.
“Nos pusimos de acuerdo en que estamos en desacuerdo sobre ello”, señaló Merkel en una rueda de prensa conjunta con Netanyahu, quien está de visita en Berlín.
Merkel resaltó la necesidad de “continuar el trabajo para una solución basada en dos Estados”, intentar el relanzamiento de negociaciones entre palestinos e israelíes y “evitar acciones unilaterales”.
Netanyahu declaró que el tema de los asentamientos judíos debería resolverse mediante las negociaciones. “Pero el problema no radica allí”, subrayó.
El Gobierno de Israel aprobó el pasado 30 de noviembre la construcción de 3.000 viviendas en las colonias judías de Jerusalén Este y Cisjordania, territorios palestinos que están ocupados según el derecho internacional.
Esta decisión fue anunciada al día siguiente de que la Asamblea General de la ONU concediera a Palestina el estatus de observador, a pesar del rechazo de Israel.
El plan israelí, que suscitó críticas incluso entre los aliados de Tel Aviv, amenaza con romper la continuidad de los territorios palestinos y cerrar su acceso a Jerusalén.
Para los palestinos, cesar la expansión de las colonias judías en los territorios ocupados es la condición fundamental para la reapertura de las negociaciones de paz que se suspendieron en 2010.
