El presidente ruso, Vladímir Putin, afirmó hoy que Moscú no tiene intereses específicos en Siria y busca únicamente frenar la guerra en este país.
“Los acuerdos basados en una victoria militar no vienen al caso ni surtirán efecto”, declaró Putin en un encuentro con la prensa.
Afirmó que Moscú no se preocupa por el futuro de Bashar Asad. “Somos conscientes de lo que pasa, es una familia que lleva 40 años en el poder y, desde luego, hay demanda de cambios. Nos preocupa otra cosa. Solo queremos prevenir que los opositores de hoy, una vez en el poder, se pongan a luchar contra las autoridades actuales que habrán pasado a la oposición, y que eso dure eternamente”, dijo.
Rusia tiene pocos intereses en Siria, prácticamente nulos, según el mandatario ruso, y aboga por “una fórmula que evite la desintegración y una guerra interminable en este país y en la región”.
Es necesario que las partes en conflicto logren primero un acuerdo sobre las garantías recíprocas de seguridad y sobre la participación en el futuro Gobierno. A partir de ahí es posible cambiar el orden vigente, no al revés, primero destruirlo todo y luego buscar un acuerdo, subrayó.
