La japonesa Misao Okawa, a quien el Libro Guinness de los récords reconoció a finales del pasado mes como la mujer más longeva del mundo, cumplió hoy 115 años.
En una entrevista con la televisión TBS, Okawa confesó que jamás había pensado llegar a una edad tan avanzada pero ahí está “gracias a todos”.
En la residencia donde vive le prepararon una mesa festiva en la que no faltó el sushi de caballa, su plato favorito.
Misao Okawa nació en 1898 en Osaka, en la familia de un confeccionista de kimonos. Tuvo tres hijos, dos de los cuales siguen vivos y ya tienen más de 90 años, así como cuatro nietos y seis biznietos.
La esperanza de vida de mujeres al nacer en Japón es de 87 años, lo que sitúa a este país en la primera posición del mundo, según las estadísticas de la ONU.
El hombre más anciano del mundo ahora también es un japonés, Jiroemon Kimura, de 115 años.
