El papa Francisco llamó a los participantes en la conferencia internacional de paz sobre Siria inaugurada hoy en Montreux a que no escatimen esfuerzos para poner fin lo antes posible a la violencia en el país árabe.
“Pido al Señor que toque el corazón de todos para que, buscando únicamente el bien supremo del pueblo sirio, que tanto ha sufrido, no ahorren ningún esfuerzo para lograr urgentemente el fin de la violencia y la resolución del conflicto, que ha causado ya demasiado dolor”, dijo el pontífice durante su tradicional audiencia general de los miércoles.
El papa expresó la confianza en que el conjunto de la población siria elija el camino firme de la reconciliación, la concordia y la reconstrucción, en el que sea posible encontrar en el otro no un enemigo ni contrincante, sino un hermano para aceptar y abrazar”.
La conferencia de paz sobre Siria, conocida como Ginebra 2, se inauguró hoy en la ciudad suiza de Montreux para reunir por primera vez a representantes del Gobierno y la oposición del país árabe. El foro cuenta también con la asistencia de las delegaciones de casi 40 países y representantes de la ONU, la Liga Árabe y la Organización para la Cooperación Islámica.
