La ciudad suiza de Ginebra acoge desde este lunes la segunda ronda de conversaciones entre el Gobierno y la oposición de Siria que previsiblemente intentarán abordar algunas de las cuestiones de fondo del violento conflicto interno.
Al igual que en la primera ronda de Ginebra 2, el régimen sirio estará representado en el proceso con por el ministro de Exteriores, Walid al Mualem, y sus detractores por el presidente de la Coalición Nacional Siria (CNFROS), Ahmed Yarba. Al mismo tiempo, los equipos negociadores tendrán al frente al embajador sirio ante la ONU, Bashar Jafari (Gobierno), y al miembro del comité político de la CNFROS, Hadi al Bahra (oposición).
El acuerdo para volver a la mesa de negociación fue el resultado más importante de la primera ronda de consultas que se desarrolló entre el 24 y el 31 de enero pasado y en la que las partes negociaron a través del enviado especial de la ONU y la Liga Árabe para Siria, Lakhdar Brahimi.
El diplomático argelino constató al término de las reuniones que, aunque la brecha entre ambos bandos sigue siendo “bastante grande”, existen “ciertas posibilidades” de acercar posturas.”El hielo se está rompiendo, aunque lentamente”, dijo.
Por su parte, el canciller ruso Serguéi Lavrov consideró “modestos pero alentadores” los resultados de la primera ronda, y expresó su confianza en que sean “profundizados y ampliados” durante las nuevas reuniones.
La conferencia internacional de paz para Siria, conocida como Ginebra 2, fue impulsada por Rusia y EEUU para desarrollar los acuerdos aprobados en el primer foro que se celebró en la ciudad suiza en verano de 2012.
